Iberdrola, a través de i-DE, prevé incrementar un 48 % la inversión, hasta los 51 millones de euros, en redes eléctricas en La Rioja entre 2022 y 2025.
El objetivo es atender el crecimiento de la demanda y la producción renovable y la generación distribuida; mejorar la resiliencia de la red eléctrica para afrontar los retos del cambio climático y promover la modernización en los procesos de esta infraestructura.
La compañía, en una nota, ha indicado este martes que, entre las principales actuaciones previstas para este periodo destaca la renovación completa de la subestación de Cascajos en Logroño.
También ha citado la ampliación de transformación en El Sequero y la reconfiguración de la alimentación de alta tensión a las subestaciones del entorno de Rincón de Soto.
Ha recordado que la nueva subestación de Cascajos es fruto de la colaboración de i-DE Redes Inteligentes y el Ayuntamiento de Logroño.
Se estima que pueda estar terminada a comienzos de 2024 y ha supuesto una inversión total de más de 5 millones euros, según Iberdrola, que ha precisado que las obras son complejas y se dividen en cinco partes.
Las dos primeras ya se han realizado y en la tercera se instalará la STR provisional, se desmontará la actual subestación y se iniciará la construcción del edificio.
La cuarta fase, cuyo comienzo se prevé en el verano de 2023, incluirá el inicio de la nueva subestación, que podrá estar finalizada, si esta programación sigue su curso, a principios de 2024.
El desmontaje o retirada de la estación provisional formará parte de las quinta fase.
Iberdrola cede gratuitamente al Ayuntamiento de Logroño la parcela liberada tras la finalización de las obras, parte para uso de viales y parte para espacio libre público.
Además, la compañía acelera sus inversiones en La Rioja, destinadas al despliegue de proyectos renovables, movilidad eléctrica y autoconsumo, con el fin de seguir acelerando la transición energética. EFE.
La actividad de Iberdrola en La Rioja generó un impacto socioeconómico de 65 millones de euros en 2021, en el que realizó compras y contrataciones de servicios a más de 50 proveedores riojanos, por un valor aproximado de 11 millones de euros.
El impacto fiscal de la actividad económica que la compañía llevó a cabo el año pasado en la comunidad riojana fue de 29 millones de euros y las inversiones alcanzaron los 20 millones.
Las iniciativas de Iberdrola en La Rioja están asociadas a proyectos de innovación de las redes eléctricas.