El químico y distinguido como Riojano de Honor Javier García ha querido reconocer en primer lugar la distinción por el reconocimiento de la labor de un científico porque así se da visibilidad a la ciencia. "Uno pensaría que a estas alturas ya no haría falta recordar que la razón es nuestra mejor aliada contra la ignorancia y el fanatismo. Pero no está de más en este tiempo en el que muchos insisten en negar la evidencia y el nacionalismo vuelve a alimentar la guerra en el corazón de Europa", ha justificado, de la misma forma que ha deseado y espera que  "este reconocimiento contribuya a que surjan nuevas vocaciones científicas especialmente entre las mujeres, porque el talento no sabe de género, pero si las barreras y las dificultades que son mayores para las mujeres, las minorías y las personas con necesidades especiales".  En este sentido el riojano ha explicado que en la Academia Joven de España que preside se abrien las puertas de la ciencia a todos, "para que cualquier persona pueda llegar allá donde su esfuerzo y sus sueños le lleven. Porque las barreras no solo son injustas, sino que nos hacen peores como sociedad y reducen la competitividad de nuestras organizaciones".

García también se ha referido a la Universidad de La Rioja como uno de los mejores instrumentos para lograr los logro. Y,  la UR precisamente ahora celebra tres décadas formando a "nuestros jóvenes y desarrollando una extraordinaria actividad investigadora. Y lo sé bien porque llevo muchos años colaborando con su Departamento de Química, que lleva a cabo destacadas investigaciones en áreas tan importantes como la lucha contra el cáncer o la transición energética. Desde hace 14 años, organizamos en la Universidad de La Rioja el curso más importante de historia de la química en España. Además, la Sección Territorial de La Rioja de la Real Sociedad Española de Química lleva a cabo innumerables actividades para el fomento de las vocaciones científicas".

El riojano se ha referido a su tierra como a una buena tierra de química, "de la que sembraron los Delhuyar y vendimiamos ahora en nuestra universidad, en nuestros centros tecnológicos y en todas las empresas de nuestra región que han apostado decididamente por la tecnología y la innovación". El químico ha ido más allá,  ha hecho en el discurso una vuelta al pasado aprovechando el escenario en el que se encontraba y ha explicado que en Nájera, en este monasterio, hubo una famosa farmacia, una de las mejores boticas monásticas de toda España. Durante siglos, los monjes deeste monasterio llevaron a cabo destilaciones, cristalizaciones y transformaciones de todo tipo para tratar numerosas enfermedades. Entre los muros de este monasterio, pero también en San Millán de la Cogolla, en San Prudencio de Monte Laturce y en San Martín de Albelda se tradujo, produjo y enseñó el conocimiento más avanzado de la época. De sus bibliotecas salieron libros extraordinarios que son prueba escrita de que durante siglos aquí, en La Rioja, se trabajó para entender y domar las transformaciones que ocurren en la naturaleza.

 Con todo, Javier García, ha agradecido al Gobierno de La Rioja por hacerle Riojano de Honor, pero ha añadido que "el honor de ser riojano ya lo llevo desde que nací".