El Ayuntamiento promete eliminar las goteras en Madre de Dios

Feli Agustín
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Comprende el malestar de los vecinos, que hoy protestarán por el estado del centro cívico

Jesús Manuel Fernández de Bobadilla muestra los rastros de humedad y el cubo para recoger el agua. - Foto: Óscar Solorzano

La Agencia Estatal de Meteorología no prevé que hoy caiga ni una gota de lluvia en Logroño. Ello no será óbice para que a las 7 de la tarde la entrada del centro cívico de Madre de Dios, antaño la iglesia, asista a una escena cuanto menos sorprendente: un baile bajo un paraguas. Con esta intervención, la Asociación de Vecinos, diversos colectivos y particulares quiere mostrar su malestar con el Ayuntamiento ante el estado de deterioro que sufre la cubierta del edificio, que está afectando a todo el inmueble, del que el Consistorio es propietario y cuyo equipo de Gobierno, no obstante, se ha comprometido a solucionar, aunque no delimita una fecha para ello.

«Llevamos muchos meses con nuestras reclamaciones y no se ha realizado ninguna labor de mantenimiento del tejado,  lo que ha agravado la existencia de goteras», explica Óscar Jairo Duarte, del centro cívico, que alerta de que el mal estado de la infraestructura se traduce en «humedad y frío», que va  a hacer «insostenible» el desarrollo de las actividades que tienen previsto acometer durante el invierno.  

«Hemos mantenido reuniones con concejales [Iván Reinares, de Servicios Sociales;y el de Participación Ciudadana, Kilian Cruz], con técnicos, se han hecho  visitas, promesas, se han tomado fotos y no hemos recibido ninguna respuesta», señala Duarte, que afirma que este problema se arrastra desde la pasada legislatura sin que el equipo de Gobierno haya resuelto las deficiencias del edificio.

Iván Reinares reconoce que «llevan a razón» y asegura que es la intención del Consistorio arreglar las deficiencias detectadas en la cubierta del edificio, pero el volumen de trabajo que ha asumido el departamento de arquitectura con  proyectos que se han de ejecutar con los fondos europeos en un tiempo determinado  ha obligado a demorar el arreglo del tejado.

no ha habido dejación. Rechaza las acusaciones de «dejación» realizados por los usuarios del centro y recuerda que el Gobierno municipal ya ha acometido diversas actuaciones que han beneficiado al centro.  «Lo primero que hicimos, nada más llegar, fue mover todos los hilos para que la iglesia y el convento se colocaran bajo el paraguas de la ordenación urbana», cuenta el concejal de Servicios Sociales, que recuerda que, hasta entonces, el inmueble se encontraba en un limbo legal que impedía realizar ninguna intervención. Añade que se tapió y tiró la valla que rodeaba el convento -del que hay que valorar y se encuentra en proceso de ruinas para derribarlo- para evitar la entrada de intrusos y,  simultáneamente, personal municipal comprobó in situ el estado del tejado y comprobaron que no era posible que el arreglo lo realizara el parque de servicios. «Y está pendiente de ello», concluye el concejal, que reitera que la voluntad del equipo de Gobierno «ha sido siempre» quitar las goteras.

Las actividades. «Tras intensas luchas vecinales»,  el Ayuntamiento cedió la iglesia de Madre de Dios a la asociación vecinal del barrio en 20029, que en estos 13 años ha realizado una intensa actividad, que Duarte reconoce que no se ha recuperado después de la pandemia. No obstante, mantiene clase de bailes latinos todos los viernes;una asociación practica esgrima histórica un par e días a la semana;otras dos veces a la semana hay kickboxing y empezarán a funcionar las verbenas los viernes por la tarde.  «Ha habido tejedoras, capoeira, yoga... y preparamos para octubre actividades culturales de poesía, música y teatro», avanza.