Los alojamientos riojanos esperan el lleno esta Semana Santa

Javier Alfaro
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A diez días del inicio de estas fechas hoteles y casas rurales riojanas creen que los datos serán positivos y la buena meteorología permitirá llegar al completo en muchas localidades

Procesión del Viernes Santo de 2022 en la calle Portales de Logroño, atestada de público local y visitante. - Foto: Óscar Solorzano

La buena previsión meteorológica para las próximas fechas es un imán para el turismo. Si la Semana Santa ya se esperaba positiva, el buen tiempo puede hacer que se llenen la mayoría de los establecimientos. 

A diez jornadas vista, se esperan temperaturas con mínimas que rondarán los 10 grados y máximas en torno a los 30, con probabilidad de precipitación una o dos días.

Fuentes del sector, apuntan, además, que en zonas cercanas como Rioja Alavesa el nivel de ocupación a estas alturas es «ligeramente superior» a la habitual en años previos a la pandemia.

En nuestra comunidad, la ocupación «el viernes y sábado será superior al 90%, rozando el completo en la mayoría de establecimientos, mientras que eljueves y el domingo estará en torno al 70%», comenta Demetrio Domínguez, presidente de la Asociación de Hoteles de La Rioja. 

A grandes rasgos, «las previsiones son muy buenas» porque habitualmente «en Semana Santa se llena todo, primero municipios grandes» como Calahorra y Logroño capital, «y posteriormente las localidades más turísticas como Arnedillo y Ezcaray».

Pueblos a rebosar. La tradición en las pequeñas localidades también está muy marcada. José Joaquín Sanz, presidente de la Asociación de Casas Rurales de La Rioja, remarca que «se está notando que a causa de la situación económica, la inflacción y de la actual crisis mucha gente se reserva las vacaciones y los puentes pero sale menos los fines de semana», motivo por el cual espera que esta Semana Santa «sea un buen inicio de puesta de largo de la temporada».

Explica que, «con los datos que disponemos, los días centrales ya están prácticamente completos y en general la ocupación va a ser muy alta, en torno al 90%».

Reconoce que, «generalmente, después de Semana Santa es muy buen tiempo, pero esta incertidumbre repercute en las visitas y también en las economías locales que se ven resentidas» por la situación general. Algo que ya están notando en los últimos meses en el turismo rural, porque el invierno «ha sido de muchos altibajos, con fines de semana muy buenos y otros sin casi reservas».

También aprecia «diferencias respecto del año pasado» en la antelación a la hora de reservar. En 2022 «se hizo con más tiempo que ahora, sin embargo el buen tiempo está acelerando las reservas en los últimos días, así que esperamos más reservas de última hora».