Las obras de urbanización de la calle República Argentina de Logroño, que comenzaron el pasado 21 de marzo, finalizarán a principios del próximo agosto, mes y medio antes de los previsto, ha afirmado este jueves el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero.

En un encuentro informativo en República Argentina, ha añadido que este viernes concluirá el asfaltado de esta céntrica calle, dentro de unas obras financiadas por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Ha agradecido el trabajo de la empresa adjudicataria, ANTIS, que "se comprometió para trabajar de forma intensa y avanzar en los plazos de urbanización, como así ha sido".

Ha explicado que el asfaltado terminará este viernes, 15 de julio, por lo que, a última hora de la tarde, se permitirá el tráfico rodado para residentes de los garajes de la calle.

Así, la próxima semana se realizará el paso peatonal entre Pilar Salarrullana y República Argentina y después se colocará el nuevo mobiliario urbano, con el fin de que la calle quede abierta completamente a principios del mes de agosto.

El concejal ha indicado que, durante los últimos meses, se ha comprobado que, "a pesar de ser una calle que estaba en obras, había un tránsito peatonal muy elevado y con más vitalidad que antes, con aquellas aceras tan estrechas".

"También hemos visto cómo la calle servía de lugar de encuentro y conversación al desaparecer el ruido de los coches", según Caballero, para quien, "a.pesar de que todavía falta el mobiliario, creo que ya resulta evidente la mejora y vemos que las personas que transitan por aquí utilizan toda la anchura de la acera, lo que evidencia que para nada es excesiva".

Ha recordado que el proyecto de urbanización para República Argentina, en el tramo comprendido entre Gran Vía y Pérez Galdós, trata de responder a todos los usuarios de la vía al tener en cuenta los diferentes usos y servicios; además de ofrecer un reparto proporcionado del espacio público.

Se han ampliado las aceras y se ha creado una plataforma peatonal que genera zonas estanciales, a las que se han incorporado árboles, y, la próxima semana, jardineras y mobiliario urbano.

El proyecto otorga un protagonismo especial a la intersección con la calle Pilar Salarrullana, ya que se configura ese espacio como una plaza para que ambas vías compartan tránsito de personas y estancia.

Al crearse una plataforma única, la zona destinada a calzada rodada tiene la misma cota que las aceras y se mantiene un único carril de acceso desde Gran Vía, que modifica su trazado fuera del eje de la calle para que los conductores reduzcan su velocidad y se calme el tráfico.

En la intersección con avenida Pérez Galdós se conservan los dos carriles de salida, con el fin de mantener la capacidad de la vía para tráfico rodado.

A ello se suma la creación de un nuevo paso peatonal con la intersección de la calle Pilar Salarrullana, que permite el cruce en esta zona de mayor tránsito de personas.

Para favorecer la logística, se mantiene una banda de aparcamiento de alta rotación, con un máximo 20 minutos de estacionamiento; y carga/descarga en la acera este; así como otras tres plazas en la acera oeste, en el inicio de la calle junto a Gran Vía.

También se incorpora como dotación una plaza reservada para personas con movilidad reducida y estacionamiento para motos y bicicletas.