La Policía Nacional ha informado de que, tras la agresión producida el pasado 10 de enero, y por la que el Sindicato Médico convocó una concentración de repulsa, se detuvo a un padre y un hijo acusados de un delito de atentado contra un agente de la autoridad-funcionario.

En nota de prensa, la Jefatura Superior de la Policía Nacional ha detallado que los dos varones, de 61 y 35 años de edad, padre e hijo, son vecinos de Logroño, de origen español y no les constan antecedentes
policiales.

Los hechos, ha relatado, sucedieron el pasado martes, 10 de enero, sobre las 21:00 horas en el Servicio de Urgencias del Hospital de San Pedro, cuando la víctima, un médico, se encontraba pasando consulta cuando escuchó fuertes gritos en el despacho contiguo.

Imagen de los detenidos captada por una cámara de seguridad - Foto: Policía Nacional

Acudió para saber lo que ocurría y, al entrar en la sala, observó a dos varones con su compañera sanitaria. Uno de ellos, el hombre de 35 años, que llevaba puesta una vía, le increpó: "Qué pasa, quieres que nos peguemos".

El acompañante de este hombre, su padre, cerró la puerta del despacho pero, aún así, el médico pudo volver y entrar en compañía, esta vez, de un vigilante de seguridad.

Al entrar en la consulta los dos varones, relata la policía, continuaban en actitud desafiante con su compañera médica, por lo que el médico les pidió que dejasen esa actitud.

En ese momento, el hombre que llevaba puesta la vía comenzó a grabarle con un teléfono móvil. El médico le pidió que dejara de grabarle, apartándole el brazo, instante en el que se le cayó al suelo el teléfono móvil.

Después, el hombre comenzó a empujar al médico, acabando con un fuerte empujón que hizo que perdiera el equilibrio y cayera hacia atrás golpeándose la cabeza y teniendo unas lesiones de las que tuvo que ser asistido.

Desde el centro sanitario, se llamó al 091 y acudió a Urgencias del San Pedro una patrulla.

Los agentes de la Jefatura Superior de la Rioja, tras la correspondiente investigación, han podido determinar que se originó una discusión debido a que al detenido de 35 años de edad se le comunicó, por el personal sanitario, su ingreso en el Hospital cuando se encontraba siendo asistido en box.

En ese momento dijo que "quería irse del centro" por lo que se le diese de alta gritando: "O me quitas la vía o me la arranco"; chillos que había escuchado el médico y por eso acudió para ver lo que ocurría.