Tras los últimos resultados, la Unión Deportiva Logroñés tiene una urgencia vital. El equipo riojano tiene que volver a conocer la victoria para sumar tres nuevos puntos que sirvan para recuperar la moral, cambiar la dinámica y, sobre todo, para alejarse de nuevo de las zonas de peligro de la clasificación.

Los riojanos, que no saben los que es ganar desde hace ocho jornadas (ante el Mirandés por 1-0), han ido dejando que el colchón de puntos sobre el descenso se fuera desinflando poco a poco. Bien es cierto que los rivales más directos con la UDL no han recortado de forma excesiva pero, jornada tras jornada, la distancia con el descenso se va haciendo más corta.

Así, el equipo que dirige SergioRodríguez solo ha podido sumar siete puntos de los últimos 42 e, incluso, se ha perdido ante el Alcorcón, rival directo y por entonces colista de la tabla.

Con estos datos y con la dinámica negativa de los logroñeses, el duelo ante el Albacete, además de ser directo, se traduce en una auténtica final donde la victoria supondría mucho más que tres puntos.

En caso de sumar la novena satisfacción de la temporada, la Unión Deportiva Logroñés se alejaría un poco más de las posiciones de descenso y, además, conseguiría llevarse el goalaverage, dato muy importante en caso de empate a puntos, con los manchegos. 

En el partido de ida, uno de los más plácidos de los riojanos en la Liga Smartbank, se consiguió la victoria más holgada del curso por 2-0 en Las Gaunas.

Para ello, Sergio Rodríguez recupera a Iñaki pero frontará el partido con la incógnita de hasta siete jugadores del primer equipo. Está por ver si Unai Medina, Zelu, Clemente, Errasti, Paulino y Dani Pacheco podrán  estar a disposición de Sergio para la trascendental cita mañana sábado en el Carlos Belmonte (20:30 horas).