Tras pasar una de las peores temporadas en Valdezcaray a causa de la escasez de nieve del invierno 2019-2020, este año está todo preparado para abrir el mismo 1 de diciembre nieve o no nieve, «haya o no haya nieve», indica el gerente de la estación riojana, Jorge Lladó. Es la previsión en condiciones normales, «a no ser que la pandemia o alguna alerta sanitaria lo impida». Este año se abrirá la estación ya en diciembre aunque sea para uso turístico, y la temporada concluirá en Semana Santa.
Las infraestructuras están preparadas, y en cuanto a lo que tiene que ver con la pandemia, durante todo el verano han estado adecuando el protocolo, «aun así estamos esperando a un protocolo específico para todas las estaciones de esquí que van a enviar desde la Federación Nacional de esquí». Habrá filas únicas. Desinfección de vehículos y de las zonas comunes, y los esquiadores tienen que ir también con mascarilla.
Como novedades, para este año se ha habilitado en el pueblo de Ezcaray una taquilla y punto de venta para poder comprar el forfait y no tener que hacerlo en la propia estación. Se podrá comprar desde el día anterior. Estará ubicado en la oficina de Turismo de Ezcaray desde las ocho a las nueve de la noche.
En la propia pista, se ha instalado una telesilla nueva. «Contratada por el anterior equipo de Gobierno en 2019», apunta el gerente, y ya está instalada. Va desde la cota 1.600 metros a los 1.800. «Va a aligerar los tiempos de espera y que haya menos gente en las filas, y menos contacto entre la gente». Puede transportar a1.500 viajeros por hora. «Valdezcaray tenía unos remontes que permitían hasta ahora transportar a 16.400 viajeros por hora, y ahora pasará a 17.900».
Para este año también se han instalado los códigos QR por la estación para que los usuarios se puedan descargar los planos, en vez de que los tengan que llevar en mano. Y la intención es modernizar los accesos del forfait con tarjetas en vez de con la pegatina que llevan ahora.
Esquiar en la ladera sur.
Y una de las novedades que se incluirán en esta temporada, al menos como prueba para ver cómo funciona, es el esquí ratrack. «Se va a poner a prueba para ver qué sensaciones tienen los esquiadores para implantarlo lo antes posible». Se trata de una modalidad para esquiadores expertos que les permite esquiar en la cara sur del San Lorenzo, «además de aprovechar unos 10 kilómetros más de pistas nuevas, se ofrece un plus que buscan muchos expertos, pisar la nieve virgen. Y los clientes son remontados hasta esa parte del San Lorenzo por máquinas pisapistas en vez de por telesilla o arrastres. «Pero hay que testar todo», insiste Lladó, desde el tiempo que le cuesta a la máquina llevarlos, cuántos pueden llevar. «No hay que tocar ni una piedra, porque no hay que hacer obras». «Toda la vida hemos soñado con esquiar la cara sur de Valdezcaray nos abriría un abanico importante».
Por otro lado, y aunque ya se puede hacer excursiones con raquetas, también se quiere potenciar el esquí de fondo, y preparar una pista por la zona de Cobetia.
Visita a pie.
Por otro lado también hay intención de mejorar en todos los accesos a las pistas y se van a mejorar las infraestructura de la hostelería, para aprovechar más la terraza solarium para gente que quiera subir y no quiera esquiar, de hecho la intención es poner una pasarela para que se pueda hacer una visita por la estación a pie y hasta este restaurante sin que haya que pisar la nieve.
Valdezcaray cuenta con tres servicios de hostelería. A la cota de 1.500 metros, hay una cafetería y restaurante. Otra a a los 1.600 (que es la del solarium). Y a los 1.800 hay un bar pequeño de madera con chimenea de leña, «que es el que más gusta a los clientes», y al que solo pueden acceder esquiadores.
Para darle más uso turístico ya este año a esta estación se ha recortado la tarifa del primer telesilla para subir al restaurante, con un precio de cuatro euros (incluye los seguros). También hay un abono de 80 euros para la gente que no esquía pero que puede subir siempre que quieran hasta la cota de 1.600 metros.