El enganche a la subestación móvil cortará la luz una hora

El Día
-

La desconexión de la actual instalación eléctrica y la entrada en servicio de la provisional, que funcionará mientras se construye la definitiva, se efectuará en mayo e Iberdrola avisará del corte con 48 horas de antelación a todos sus clientes

Representantes municipales y de Iberdrola, durante la visita a la instalación de la subestación eléctrica provisional en el barrio de Cascajos. - Foto: Ayuntamiento de Logroño

La subestación móvil de Cascajos entrará en funcionamiento de forma provisional el próximo mayo, cuando la actual sea aislada de la red eléctrica y empiece su desmontaje, para lo que, en este trasvase, se hará un solo corte eléctrico de una hora, programado y avisado con 48 horas de antelación por cada uno de los clientes.

Así lo ha afirmado este martes el delegado institucional de Iberdrola en La Rioja, Carlos Sobrino, en un encuentro informativo durante su visita, junto al alcalde de Logroño, Pablo Hermoso de Mendoza, a las obras que se desarrollan en la subestación eléctrica del barrio de Cascajos para soterrarla en su misma ubicación actual, informa Efe.

Sobrino ha explicado que el próximo junio se comenzará con el desmontaje de la actual subestación, que durará "entre dos y tres meses", con la vista puesta en que su soterramiento concluya "a finales de 2023 o principios de 2024", para lo que será necesario otro corte eléctrico similar con "las mínimas incomodidades".

Ha destacado "el cumplimiento de los plazos fijados en el convenio" entre el Ayuntamiento logroñés y esta empresa firmado en verano de 2021, y por el que las obras de soterramiento se iniciaron en el último trimestre de ese mismo año.

"De las distintas opciones que planteamos, hubo un consenso entre el Consistorio e Iberdrola para adoptar esta decisión de integración de la subestación en el entorno urbano que nos alinea con otras ciudades de tamaño parecido al nuestro y que constituye la solución ideal para instalaciones eléctricas", ha subrayado.

Ha resaltado la importancia del cerramiento estético, ya que "se va a instalar una subestación con una tecnología que es cuatro décadas posterior a la actual, que es tecnología de la década de los 80", por lo que, en la nueva, "los campos eléctricos están confinados y no hay ningún elemento en tensión".

Además, ha proseguido, esto se traducirá en "reducción de ruidos y todos los equipos eléctricos estarán bajo cota de rasante 0" a lo que se suma "una mejora de la calidad de suministro por mantener la ubicación en el centro de cargas".

Ha precisado que "Iberdrola cederá de forma gratuita al Ayuntamiento de Logroño la parcela liberada tras la finalización de las obras, en parte para uso de viales y en parte para espacio libre público".

En su intervención, el alcalde de Logroño ha detallado que esta actuación tendrá un coste de 5,89 millones, de los que Iberdrola participará en los referentes a la ejecución de esta instalación, que suman 1,5 millones de euros, por lo que el importe neto que el Ayuntamiento asume es de 4,39 millones de euros.

Ha especificado que "estas obras son complejas, están siendo ejecutadas por Iberdrola y se dividen en cinco partes, de las que las dos primeras ya se han realizado y, en esta tercera fase se instalará la subestación móvil provisional, se desmontará la actual subestación y se iniciará la construcción del edificio".

"En la cuarta parte, que se prevé comience en verano de 2023, se iniciarán las obras de la nueva subestación, que podrá estar finalizada, si esta programación sigue su curso, a finales de ese año o comienzos de 2024, y la quinta fase corresponde al desmontaje y retirada de la estación provisional", ha concretado.

Hermoso de Mendoza ha explicado que, "con este proyecto de soterramiento completo, el equipamiento queda por debajo del nivel de la calle Miguel Delibes, y solo serán visibles los edificios de acceso y las chimeneas".