El Calahorra aspira a repetir la gran temporada realizada a las órdenes de Emilio Remírez, en la lejana 2000-01, y el pasado curso con Diego Martínez. Los rojillos, una vez festejada la permanencia, miran hacia arriba y, con la victoria ante el Valladolid B, vuelven a mirar de reojo la quinta posición. Los de Eduardo Docampo son octavos a cinco puntos de la Unión Deportiva Logroñés, que a su favor tiene la diferencia de goles.
El calendario ha querido que en 180 minutos se aclaren las opciones de fase de ascenso de cuatro equipos: UDL y Ferrol, que se ven las caras en Las Gaunas, más Celta By Calahorra, que juegan en Barreiro. Ambos encuentros comienzan mañana a las 17 horas.
A falta de dieciocho puntos, el conjunto rojillo tiene derecho a soñar con progresar en la tabla. El objetivo más ambicioso pasa por la quinta posición. El secundario por la sexta, posicionamiento que dará derecho a disputar la próxima edición de la Copa del Rey siempre y cuando el filial celtiña acabe entre los cinco primeros clasificados (solo los cinco mejores de cada grupo de Primera RFEF, excluidos los filiales, se harán con una plaza en la Copa 2022-23).
Los riojabajeños tienen por delante un calendario ilusionante con tres citas ante rivales de su liga (Celta B, Rayo y Unionistas) y otras tres ante formaciones que aspiran a la permanencia. Ninguna será fácil aunque en caso de triunfo ante vigueses, majariegos y salmantinos resolverán a su favor la diferencia de goles, circunstancia nada baladí en una tabla comprimida al máximo con siete equipos, del Celta B (que perdió 1-0 en La Planilla) a Real Unión, separados por siete puntos.
De momento, los calagurritanos, con 48 unidades, saben que en caso de victoria en Barreira solo podrán avanzar un puesto en la tabla, en función del resultado del Rayo Majadahonda ante el Racing, sólido líder. El Badajoz acabará la jornada con 52 puntos ya que derrotará 0-2 al Extremadura.
El Calahorra afronta su visita a Barreiro en un buen momento de forma aunque el cuadro vigués también lleva al final de curso en buena predisposición. Los vigueses son cuartos con 54 puntos pese a haber caído recientemente ante Tudelano, Zamora y Sanse. El empate con el DUXy los triunfos ante Deportivo y Talavera, in extremis, les permiten seguir dependiendo de sí mismo para volver a pelear por el ascenso a Segunda (el pasado mes de mayo les eliminó en semifinales el Athletic B, que perdió la Segunda con el Burgos, verdugo del Calahorra). Los vigueses no renuncian por ahora a la tercera plaza.