Investigado por conducir ebrio y en zig-zag por la N-232

El Día
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El conductor arrojó una tasa de alcohol cuatro veces superior a la permitida cuando fue interceptado por la Guardia Civil, tras recibir la llamada de un ciudadano que alertó de que ponía en grave riesgo la seguridad de otros automovilistas

Agentes del Sector de Tráfico de la Guardia Civil en La Rioja han investigado a un conductor que circulaba en "zig-zag" por la carretera N-232 en Calahorra, como presunto autor de sendos delitos contra la seguridad vial por conducir vehículo a motor de manera temeraria y bajo los efectos del alcohol.

En una nota, la Benemérita ha detallado este martes que el conductor investigado es un varón de 58 años, natural de Rumanía y vecino de Calahorra.

En la imagen se aprecia cómo el camionero que viene de frente se aparta hacia el arcén para evitar la colisión con el coche del conductor borracho.En la imagen se aprecia cómo el camionero que viene de frente se aparta hacia el arcén para evitar la colisión con el coche del conductor borracho. - Foto: Guardia Civil

Sobre las 06:40 horas de este lunes, se recibió la llamada telefónica de un ciudadano en la que se alertaba de la presencia en la N-232, a la altura de Calahorra, de un vehículo que circulaba en "zig-zag".

Agentes del Sector de Tráfico localizaron el coche a la altura del punto kilométrico 08,200, de la LR-285, en el término municipal de Alfaro, donde comprobaron que el conductor invadía el sentido contrario y ponía "en grave riesgo su integridad y la del resto de usuarios de la vía".

Una vez interceptado se procedió a la identificación del conductor, quien "presentaba signos evidentes de embriaguez", por lo que fue sometido a las pruebas de detección de alcohol legalmente establecidas y arrojó tasas de 1,06 y 0,97 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, casi cuatro veces más de lo permitido.

Por ello, los agentes procedieron a la inmovilización del vehículo y la investigación de su conductor por los delitos citados.

Conducir un vehículo a motor o ciclomotor con una tasa de alcohol en aire espirado superior a 0,60 miligramos por litro lleva aparejada la detención del conductor, como presunto autor de un delito contra la seguridad vial, que está castigado con penas de prisión de 3 a 6 meses o multa de 6 a 12 meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, además de la privación del permiso por un tiempo de 1 a 4 años.

La Guardia Civil ha agradecido la llamada realizada por el ciudadano para alertar de los hechos, ya que esta colaboración ha permitido "apartar de la circulación a un delincuente vial y evitar un siniestro de consecuencias impredecibles".