La Guardia Civil investiga dos incendios "intencionados" de paja. El primero de ellos tuvo lugar en octubre en un paraje del término municipal de Briones en el que ardieron 500.000 kilogramos apilados para su posterior venta. El segundo ha sido provocado esta misma mañana hacia las 6 horas en el término municipal de Hormilla, en concreto, en la zona de la ermita de La Concepción. Un fuego éste último que afecta a 1,1 millones de kilogramos y que "permanecerá ardiendo unos 4 o 5 días", detalla Claudio García, propietario de la paja almacenada para su venta.
En la mañana de ayer, la cortina de humo empezaba ya a ser visible por buena parte de La Rioja Alta. "Ha llovido muy poco y la paja está muy seca", concreta el agricultor del municipio riojano.
Según sus propios cálculos, las pérdidas económicas ascienden a unos 60.000 euros. Se trata de una paja que Claudio recoge y almacena para su traslado a la empresa zaragozana Marcen Bolea, quien a su vez, se encarga de comercializarla para uso ganadero y para combustión. Parte de ella es trasladada a Francia.
Este agricultor de Hormilla no apunta sus sospechas hacia "nadie de la zona, ni agricultores, ni cazadores.." y se encuentra a la espera de recibir algún tipo de información por parte de la Guardia Civil. Más allá de las pérdidas económicas, Claudio García ve convertido en llamas buena parte del trabajo desarrollado durante todo el verano.