2 de abril. Fecha elegida por Yolanda Díaz para anunciar si presenta o no su candidatura a la presidencia de gobierno en las elecciones generales. Y lo más importante, con quién se presenta, con qué siglas, con qué partidos.
El día antes, Podemos celebra su Consejo Ciudadano Estatal, máximo órgano entre congresos. Es evidente que Díaz ha tenido ese Consejo, en el que Ione Belarra, la actual líder del partido, tendrá que pronunciarse sobre Yolanda Díaz y sobre la posición de Podemos respecto a un pacto con Sumar.
Va a hacer dos años que Pablo Iglesias designó a Yolanda Díaz vicepresidenta y candidata a la presidencia del gobierno por Podemos, condicionado esto último a la ratificación por el partido. Desde entonces, Yolanda Díaz ha querido marcar perfil propio creando una plataforma, Sumar, que desde el primer momento se ha ido alejando gradualmente de Podemos y de quienes habían sido no solo compañeras sino sobre todo amigas de Yolanda, Irene Montero e Ione Belarra. Escenario habitual en la trayectoria política de Díaz, que cada vez que lograba un cargo institucional marcaba distancias con el partido que la había incluido en sus listas. Eso explica el recelo que existe en gran parte de la izquierda gallega respecto a Yolanda Díaz, que sin embargo ha conseguido seducir políticamente a gran parte de españoles, que la consideran una de las políticas más valoradas. El propio Iglesias también la tuvo en su máxima consideración hasta que inició el desapego hacia quienes la habían protegido e impulsado. No es el único caso en política.
Después de año y largo de "escuchar a la gente", llega el momento de tomar decisiones. Sumar y Podemos parecen destinados a entenderse -es lo que quiere Pedro Sánchez- , pero hay dificultades. Podemos exige que, antes de alcanzar cualquier tipo de acuerdo, Díaz debe aceptar que Podemos es el partido fuerte y por tanto aceptar también sus normas, entre ellas la celebración de primarias para elegir al candidato a la presidencia del gobierno y a encabezar las listas en las elecciones generales. Yolanda se resiste, las primarias harían peligrar su candidatura, Sumar apenas tiene más patrimonio que seguidores que ni siquiera están organizados.
Tampoco cuentan con una estructura, ni sedes, ni fondos para emprender una campaña electoral; sus cargos no han sido elegidos con las siglas Sumar, así que el partido no recibe subvenciones. Sumar por tanto necesita a Podemos … pero Podemos no va a aceptar que Yolanda Díaz mande en todo y para todo. Mucho menos tras haber mostrado deslealtad a Pablo Iglesias, a Belarra y a Irene Montero, con gestos de ninguneo que no han servido precisamente para promover un buen clima.
Habrá que estar atentos al 2 de abril, pero también al Consejo Ciudadano de Podemos del día anterior y a todo lo que suceda desde ahora hasta entonces: Podemos y Sumar se necesitan mutuamente … pero hoy por hoy las cúpulas se detestan.