El cantautor de La Rioja

M.A.G-S.
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Chema Purón, el cantante que puso la banda sonora a La Rioja de los setenta y ochenta, hace un repaso por sus diez lugares favoritos de la región

Chema Purón posa en el Balcón de Cameros, uno de sus rincones riojanos preferidos. - Foto: El Día

Chema Purón (Logroño, 1951) es uno de los músicos más reconocidos de nuestra región.  Creó el Dúo Fender siendo un adolescente precoz. Posteriormente, Los Yancos le tomaron el relevo. Fue el grupo que puso la banda sonora a La Rioja de los setenta y ochenta. El cantautor alumbró en esta época cuatro discos Alma (1977),  A mi compañera (1978), A la orilla del mar (1980) y En ti (1982). Pero también ha puesto música y letra a muchas composiciones interpretadas por El Puma, Francisco o Paloma San Basilio.

Estos son los diez lugares favoritos de Chema Purón:

 

1.El Balcón de Cameros. Se fue en 1970 a Madrid a estudiar y, desde entonces, la primera o la última mirada a Logroño y al valle del Iregua la realiza desde el Balcón de Cameros, uno de los muchos miradores privilegiados de nuestra comunidad. «Me encanta esa vista con las Peñas de Viguera como telón, es mi rincón preferido», informa el cantautor Chema Purón. 

2. Nájera. La elección de la capital del reino es obligada. Su mujer, Gloria Carrillo, es najerina. Además esta ciudad está íntimamente ligada al autonomismo riojano y a los inicios de su carrera musical allá por los setenta. «El último año que estuve en Logroño, aunque soy de los que se considera que nunca me he ido por mucho que lleve 50 años en Madrid, nos contrataron en el Bar El Moro. Tocamos durante tres meses los fines de semana», ese es su primer recuerdo najerino. «Ahí conoció a Gloria, «la chica más guapa de Nájera, con la que me casé», continúa.Eso sucedió hace 44 años. Además,  aquí vivió «el primer Día de La Rioja». «Lo recuerdo perfectamente, como si estuviera ahí. En Nájera vimos la fuerza que tenía La Rioja», agrega. A la localidad sigue yendo muy a menudo. Sus escenarios predilectos son el «Paso Malo y las Siete Cuevas». «Es un paseo magnífico aunque también me gusta andar por las choperas del Najerilla y la vista que ahí desde la punta del Castillo», completa. «Se ve media Rioja», exagera.  

3.Murillo de Río Leza. Está claro que no es el municipio más bello de La Rioja pero sí que es uno de los que mejores recuerdos traen a Chema Purón. «Mis abuelos paternos tenían una finca, La Balsa. Ahí iba de niño. Me encantaba. Fue en La Balsa donde aprendí a montar en bici, a apreciar el paisaje», rememora.

4.El Achichuelo. El Achichuelo es una de las área recreativas mejor valoradas por los riojanos. Para Chema Purón, «el Alto Valle del Iregua, Villoslada y Cebollera son un lujo para los riojanos». «Especialmente en otoño», acota. Y si se tiene que quedar con un enclave, no hay mejor, sin duda, que «El Achichulo». 

5. Otoño riojano. No hay mejor estación para descubrir La Rioja que el otoño. Las vides refulgen y La Rioja presume en todo su esplendor crepuscular. De las muchas estampas icónicas que ofrece este período, Chema Purón se queda con «el otoño sonserrano». «Me gusta acercarme a Laguardia, en Álava, y desde ahí ver nuestra región», informa. «La Sonsierra en otoño es espectacular: San Vicente y Santa María de la Piscina son mis parajes preferidos», agrega.

6. San Millán. «¡Cómo no lo va a elegir todo el mundo si es una maravilla!». Chema Purón lo tiene claro. En sus 10 Lugares no puede faltar la cuna del castellano y del euskera, Patrimonio de la Humanidad. «El cielo azul, el SanLorenzo nevada y la luz del atardecer en San Millán no tienen precio», se emociona.

7.La Casa de las Ciencias. De Logroño se queda con la vista de la capital «desde la Casa de las Ciencias». Aunque los árboles no nos dejen ahora presumir de panorámica tras las copas se intuyen «San Bartolomé, Palacios, La Redonda y Santiago». «Es la mejor vista de la ciudad, con el Ebro a sus pies».

8.Ruavieja. A Chema Purón le encanta el Casco Antiguo logroñés. «No es el de Santiago, pero es muy entreñable», afirma. Su mejor recuerdo es «entrar en Logroño por Ruavieja, como un peregrino. Es una calle que aún respira un ambiente medieval», se sorprende.

9.La Rioja Baja. Pese a ser la gran desconocida, la región tiene muchos pueblos para presumir: Calahorra, Autol, Quel, etc. «Recuerdo un concierto a los pies de la Peña de Quel. De Autol me encanta el Picuezo, qué decir de Calahorra», asienta. «Es otro paisaje, está claro, pero el mismo paisanaje».

10.Conchas de Haro. De mirador en mirador. A La Rioja también se puede entrar o salir por aquí. «Otra de las muchas postales que nos ofrece nuestra tierra».