Arturo Grávalos, listo para debutar como profesional

El Día
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El ciclista de Cervera, ex subcampeón de España sub'23, militará en el Eolo Kometa de Alberto Contador

Arturo Grávalos. - Foto: Federación Riojana de Ciclismo

El corredor riojano Arturo Grávalos es el primer fichaje que hace el equipo Eolo Kometa para su temporada de debut en la categoría Pro Team (hasta ahora Continental).

Grávalos, de 22 años, era uno de los ciclistas más prometedores de la categoría sub-23, pero hace más de un año su progresión quedó cortada por un grave accidente de tráfico en el que estuvo a punto de perder una mano; una vez recuperado su equipo mantuvo la confianza en él y le llevó a dos pruebas en calidad de "invitado".

Ahora ha dado un paso más y ha confirmado su fichaje, ya como corredor de derecho, siendo, además el primer que da a conocer para la temporada, unos días después de anunciar la incorporación como responsable deportivo del exciclista británico Sean Yates.

El corredor riojano ha subrayado a EFE que para él es una "magnífica noticia que no esperaba" porque "en las dos carreras en las que estuve hice todo lo que puede" pero "nunca sabes lo que va a pasar y hasta que no recibí la llamada no estaba seguro de qué iba a pasar".

Además, ha incidido, su fichaje llega "en un momento en el que el equipo da un paso adelante" al tener una nueva categoría "y eso también hace que yo tenga que dar un paso adelante y ser consciente de que empieza para mi una nueva etapa, con un ritmo mucho más exigente".

El corredor ha admitido sentir "algo muy especial" en estos momentos "porque echo la vista atrás y recuerdo como estuve a punto de dejar el ciclismo".

"Los médicos me decían que bastante suerte había tenido con tener todavía mano, con las lesiones que tuve", ha explicado, en alusión a cómo quedó su mano izquierda tras un accidente de tráfico "y me aseguraron que esta mano nunca recuperaría sus funciones".

Fue un doctor de Zaragoza, Julio Delgado Martínez, "el que me dio una esperanza" y "el que consiguió que pudiera volver a tener una mano normal, en la que, salvo lo estético, casi no se nota nada", ha concluido el corredor riojano.