La Dirección General de Tráfico (DGT) trabaja con diferentes niveles de alerta para indicar la dificultad a la hora de circular por las carreteras. Son cuatro: verde, amarillo, rojo y negro. Es importante entender qué implicada cada uno de ellos a la hora de circular por carretera para saber qué precauciones tomar.

NIVEL VERDE. Se activa cuando empieza a nevar. Se recomienda circular a un máximo de 100 kilómetros por hora en autopistas y autovías. En el resto de vías, la velocidad máxima indicada es de 80 kilómetros por hora. Los camiones deben circular por el carril derecho sin adelantar. Los conductores deben evitar los puertos de montaña, extremar la prudencia y prestar atención a los partes metereológicos.

Efectivos de la Guardia Civil trabajando en la mañana de este sábado en la carretera nacional N-111 - Foto: GUARDIA CIVIL

NIVEL AMARILLO. Corresponde a vías parcialmente cubiertas por nieve. La circulación de camiones y vehículos articulados está prohibida. Los autobuses y el resto de vehículos deben circular a un máximo de 60 kilómetros por hora. Hay que evitar hacer maniobras bruscas. Además, en las curvas y zonas de descenso hay que reducir aún más la velocidad.

NIVEL ROJO. Comienza cuando las carreteras están cubiertas de nieve. Está prohibida la circulación para vehículos articulados, autobueses y camiones. No debe rebasarse a vehículos inmovilizados si no existe la seguridad de poder seguir circulando después. Además, solo se puede circular con cadenas o neumáticos especiales a una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora.

NIVEL NEGRO. La nieve que cubre la calzada ya tiene mucho espesor en este nivel y se prohíbe totalmente la circulación. Los vehículos que se queden bloqueados deben encender la calefacción. No se debe abandonar el vehículo excepto si exsite un refugio. Con el fin de no obstaculizar el trabajo de los equipos quitanieves, se debe tratar de estacionar el vehículo lo más orillado posible.