Pocos riojanos habrá que no hayan cantando o bailado alguno de los temas más míticos del grupo Mocedades. Canciones como Eres tú o Tómame o déjame han acompañado a varias generaciones en sus amores y desengaños o han sido la banda sonora de viajes familiares o fiestas patronales. El grupo actúa esta noche en Calahorra, dentro del programa del festival Bimilenaria Cultural, como uno de los grandes conciertos del verano calagurritano. Es la tercera vez que Mocedades visita La Rioja con su gira de 50 aniversario. «Casi todos los del grupo tenemos gente aquí, como yo que tengo familia y siempre nos apetece venir. Es un sitio muy especial», afirma Javier Garay. Es el único de los ‘seis históricos’ de un grupo icónico de la música española, integrado entonces por los hermanos Amaya, Izaskun y Roberto Uranga (ya fallecido), Javier Garay, Carlos Zubiaga y José Ipiña, y que se subió al escenario de Eurovisión en 1973. Una actuación que les valió un segundo puesto y supuso el empujón definitivo al éxito internacional.
«La veces que hemos actuado en La Rioja siempre nos han tratado muy bien», recuerda Garay tras actuar en mayo en Logroño y Santo Domingo de la Calzada con gran respuesta del público. A pesar de su veteranía, reconoce que sigue poniéndose nervioso antes de salir al escenario, «siempre hay nervios», pero se pasan en cuanto ve la reacción del público, «que siempre es muy buena». Tras una larga trayectoria en el mundo de la música, Garay no piensa en la retirada. «A mi me gusta y quiero seguir en activo en esta profesión, por eso, mientras dure seguiré y cuando no pueda me retiraré», asegura. «Yo soy consciente de la edad que tengo, pero me lo paso muy bien y disfruto como cuando tenía 20 o 30 años», afirma. Con un amplio repertorio, Garay reconoce que le es difícil elegir una canción entre todas, aunque el tema Eres tú le gusta especialmente. «Eran dos canciones y yo le comenté a Juan Carlos Calderón lo que me gustaba de cada una», recuerda y tras lo cambios surgió el tema que les dio fama internacional en los años setenta. Con él, vendieron millones de copias en todo el mundo y la canción ocupó el número uno en muchas listas europeas y americanas, llegando a noveno disco más vendido del año en EE.UU, según Billboard. Mocedades inició entonces su época de mayor éxito comercial. Pero Garay también destaca otros temas como El color de tu mirada, Solo era un niño o Talismán. Canciones que forma parte del repertorio que sonará esta noche en el parking de la Catedral de Calahorra, donde seguro se reunirán abuelos, padres, hijos y nietos en torno a un grupo que traspasa generaciones. Un repertorio que «se ha transmitido de padres a hijos», apunta Garay, quien cree que una de las claves del éxito de Mocedades es su marcado carácter coral. «Los coros tienen tanta importancia como los solistas». «Los temas de toda la vida no pueden faltar», asegura, porque «el público los pide». Pero el grupo también interpretará la última canción que ha grabado y que lleva por título Qué no se acabe el mundo, un tema de Óscar Gómez.