Logroño renueva el voto al patrón con luminarias y campanas

El Día
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El Ayuntamiento invita a la ciudadanía a colocar luminarias en sus ventanas y guardar un minuto de silencio a medianoche de este miércoles, cuando repicarán las campanas en memoria de todos los afectados por la pandemia

Las campanas sonarán a medianoche. - Foto: INGRID

El concejal de Festejos de Logroño, Kilian Cruz, ha invitado a la ciudadanía logroñesa a colocar luminarias en sus ventanas y guardar un minuto de silencio esta medianoche, cuando repicarán las campanas en memoria de todos los afectados por la pandemia de coronavirus y como forma de cumplir el voto a San Bernabé.

Las medidas de seguridad impuestas para evitar la propagación de la COVID-19 han obligado a suspender las fiestas patronales de San Bernabé, pero el Ayuntamiento logroñés ha querido mantener viva alguna de las tradiciones de estos festejos, que conmemoran el triunfo de la ciudad tras el asedio del ejército francés en 1521.

Cruz ha detallado que los miembros de la Corporación colocarán una vela encendida en los balcones del edificio consistorial a las doce de la noche, un gesto que ha invitado a secundar a todos los vecinos.

Después, se guardará un minuto de silencio en recuerdo de las personas que han fallecido o han sufrido la enfermedad de la COVID-19 durante los últimos meses y las campanas de la concatedral de La Redonda repicarán en señal de duelo.

En agradecimiento al patrón, ya que el asedió concluyó un 11 de junio, los logroñeses instituyeron el voto a San Bernabé, de modo que se comprometieron a cumplir algunas tradiciones en conmemoración de la victoria, como celebrar un misa de vísperas, levantar cinco arcos de triunfo, brindar banderazos por parte el alcalde y guisar un toro.

El encendido de las luminarias se realiza cada medianoche del 10 de junio desde el año 2015, cuando se recuperó esta tradición, que este 2020 tendrá un sentido "más íntimo", ha detallado Cruz.

Tampoco podrá celebrarse mañana el acto más emblemático de estas fiestas, que es el reparto del pan, el pez y el vino, en recuerdo a los alimentos que permitieron resistir el asedio a los logroñeses de 1521.

Sin embargo, la Cofradía del Pez, que es la entidad que cada año reparte hasta 30.000 raciones de estos alimentos, ha donado truchas a la Cocina Económica para que puedan distribuir unas 250 raciones de este producto entre los usuarios de su comedor social.