Lardero y Villamediana no tienen confinamiento perimetral pero sufrirán en gran medida el ‘cierre’ de Logroño durante un mes. Los dos grandes municipios del área metropolitana, con 10.500 y 8.000 habitantes cada uno, están literalmente pegados a la capital a donde se desplazan a diario infinidad de vecinos por trabajo, estudios, compras, actividad deportiva u ocio.
«La repercusión será muy importante, porque la relación con Logroño es muy directa», comenta el alcalde de Lardero, Manuel Vallejo, que a la espera de conocer con más detalle las nuevas restricciones aprobadas por el Gobierno de La Rioja, ve multitud de situaciones sobre las que ahora mismo existe incertidumbre en relación a cómo cumplir las normas.
Por ejemplo, Vallejo alude a la línea 1 de autobús urbano que une su localidad con Logroño, y que traslada a diario a centenares de vecinos que acuden a trabajar a la capital o estudiantes que se desplazan a clase, que no tendrán problema al ser una causa justificada, pero que teóricamente no podrían utilizar otras personas para ir de compras o a visitar a familiares.
Pero hay otros supuestos sobre los que no está claro cómo afectan las nuevas medidas. El alcalde larderano refiere el caso de la pizzería y de la hamburguesería implantadas en su municipio, que reparten comida a domicilio.
Las limitaciones para desplazarse a Logroño afectarán en gran medida a las compras de productos que Lardero no tiene en su oferta comercial, como puede ser una zapatería. El trasvase continuo de ciudadanos entre uno y otro municipio también se produce por actividades deportivas, dado que bastantes niños de Lardero acuden a la capital a practicar deporte federado, como el rugby, o a los gimnasios. También quedarán interrumpidos recorridos habituales de caminantes, como lo que el alcalde cita como la ‘ruta del colesterol’, en la avenida de Madrid, o el que realizan muchos ciclistas por la vía de servicio de la N-111 hasta Nalda.
En Villamediana, existe incertidumbre y muchas dudas sobre cómo afectará a los vecinos las limitaciones para desplazarse a la capital. Lo constata su alcaldesa, Ana Belén Martínez, que destaca que la noticia se ha recibido como «un choque», porque «Logroño es un referente que de repente se cierra».
Martínez confía en que hoy se conozca con más detalle la letra pequeña de las nuevas restricciones, y anuncia que emitirá un bando para los vecinos cuando disponga de más información.
«La vida de muchos vecinos está profesionalmente y académicamente en Logroño», explica la alcaldesa villametrense, que concreta que al no haber instituto en su localidad son muchos los estudiantes que viajan a diario a centros logroñeses. En principio, confía en que la línea 3 de autobús urbano funcione con normalidad, como ocurrió en el mes de marzo.