El sector comercial minorista de La Rioja realizará este lunes, 15 de febrero, a las 12,00 horas, una nueva protesta para exigir la reapertura de sus locales. Como ya hicieron en movilizaciones similares hace unos días, los comerciantes se "plantarán" frente sus establecimientos para mostrar su rechazo a las medidas dictadas por el Gobierno regional.
La convocatoria parte del sector Comercio de la Federación de Empresas de La Rioja (FER), en colaboración con las asociaciones comerciales de La Rioja y otros sectores de actividad económica de la región.
"Tras el plante del sector el pasado 8 de febrero y esperar a que el Consejo de Gobierno de nuestra Comunidad pudiera adoptar medidas de desescalada para el sector, las peticiones no se tuvieron en cuenta y se ha decidido continuar con la movilización del sector realizando de nuevo un plante", han indicado en un comunicado recogido por Europa Press.
Durante este acto a las puertas de cada establecimiento, el sector continuará utilizando los mismos lemas a modo de hashtag: #ComercioSeguro, #TenemosUnPlan, #ReaperturaYa e #Indemnizaciones. Además, vestirán chalecos amarillos y realizarán una protesta sonora para dar visibilidad a sus demandas.
"El sector es consciente de que la prioridad de las autoridades sanitarias es la salud frente a la pandemia, pero seguimos insistiendo en que la reapertura es factible y no implicaría el aumento de los casos de contagio entre la población, como se ha demostrado, ni mayor movilidad entre la población", han recordado. "Demorar más este inicio de la actividad está causando pérdidas económicas irreparables, de ahí que el sector ya no solicite ayudas sino indemnizaciones", han añadido. Del mismo modo, han asegurado que "el comercio no puede seguir sufriendo esta situación tan dramática con 11 meses de cierres, restricciones y limitaciones que han agravado su situación de abandono por parte de las administraciones públicas, sin un marco de ayudas directas, sin exoneraciones en los gastos fijos y sin ingresos para afrontar estos pagos". Además, cifran en "miles de familias y empleos", quienes "están pendiendo de un hilo". Por ello consideran que "no se puede retrasar más un plan vital para el comercio de la región y de sus comarcas y municipios".