Las obras del puente Mantible costarán 68.000 euros más

Efe
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Con el incremento de presupuesto a 773.200 euros no solo se reconstruirá el arco caído, sino que se acometerá la totalidad del proyecto de rehabilitación y su difusión

Imagen del puente. - Foto: Ingrid

El Ayuntamiento de Logroño ha reformulado el proyecto de intervención en el Puente Mantible tras recibir la asistencia técnica encargada, que ha determinado que los trabajos deberán ser más minuciosos de lo previsto y se prolongarán durante diez meses, cuatro por encima de lo inicial, y costarán unos 67.000 euros más, hasta los 772.000.

Así lo ha explicado este martes el concejal de Patrimonio, Adrián Calonge, y el edil del Partido Riojano, Rubén Antoñanzas, en una conferencia de prensa en la que han detallado cómo se prevé que sean los trabajos tras recibir la asistencia técnica.

Esperan que las obras se pongan en marcha en verano con el objetivo de consolidar y restaurar el puente y reconstruir el arco que colapsó en enero; la primera fase del proyecto se centrará en el asentamiento de la pila 2 y en la colocación de una estructura provisional para reconstruir la bóveda.

La asistencia técnica se ha centrado en analizar con criterios arqueológicos la bóveda caída, el estado de los arranques del arco y de las dos pilas para poder realizar las modificaciones pertinentes en el proyecto inicial llevar a cabo la restauración del estribo y de la pila 2 así como la reconstrucción por anastilosis del arco.

“De este modo, más allá de las labores de consolidación, rehabilitación y restauración marcadas inicialmente para el Puente Mantible, ahora se suma la variante de reconstruir el arco, lo que conlleva reformular el proyecto para poder quitar del mismo las acciones necesarias para su mantenimiento e incluir su reconstrucción”, ha señalado el concejal de Patrimonio y Centro Histórico, Adrián Calonge.

Ha destacado que se ha realizado un trabajo de observación y seguimiento del estado de esa pila 2, tanto en su cimentación como en la parte que aún queda en pie, que ha desvelado que ha habido un desprendimiento de las grandes lajas de piedra que constituyen la cimentación del arco y que ha ocasionado su pérdida.

También se ha comprobado la existencia de cinco grandes grietas de las cuales tres están abiertas, aunque una parcialmente sellada por el asentamiento de la pila liberada del peso del arco y otra con desplazamiento de plano”, ha destacado el edil Rubén Antoñanzas.

Con el incremento en más de 68.000 euros se va a reconstruir el arco caído sino que acometerá la totalidad del proyecto de rehabilitación y su difusión.

También se acometerá una prueba subacuática para comprobar el estado de la base del puente sumergida y la oquedad que hay en ella, que se rellenará con material hidrofugante, lo mismo que se aplicará en las que se puedan detectar.

Finalmente, para asegurar la base de la pila se reforzará la cimentación mediante cables tensores o barras de acero que hilvanen los estratos que hay bajo la pila y la anclen, lo que permitirá que la pila, las lajas de piedra, los estratos de arenas y los diferentes conglomerados permanezcan sujetos.

La restauración completa de la bóveda o arco se realizará en dos fases siguiendo el proceso de anastilosis, es decir, creando un puzle con la piedra original en una posición similar a la de la fábrica de su momento de construcción, nuevos elementos pétreos de naturaleza similar y morteros de unión hidrofugantes para facilitar su conservación.

En la primera fase se recuperarán las piezas caídas, se sanearán, se limpiarán y, en caso necesario, se restaurarán aquellas estén en peor estado de conservación.

En la segunda fase se reconstruirá el arco sobre una cimbra con las piezas originales y las nuevas en aquellos lugares donde sea necesario; la construcción de la estructura en altura se llevará a cabo antes de las lluvias otoñales y cuando la pila 2 esté asegurada.

Una vez el arco quede levantado a su posición original, se procederá a su unión con los arranques que se mantienen en pie mediante el relleno en capas de los mampuestos y su cubrimiento con piezas de piedra.

En cuanto a la conservación de los paramentos, se llevará a cabo una limpieza manual de la piedra y del mortero para retirar la suciedad, los elementos erosivos y la propia vegetación; para ello se emplearán cepillos de cerdas naturales, agua atomizada, nebulizada o a presión en función del estado de la piedra, el rejuntado con mortero de cal o los propios sillares.

Los huecos y grietas detectados en la obra serán rellenados con compuestos hidrófugos o de cal, así como dotados de elementos tensores que propicien el encofrado de estos elementos; dependiendo de la evolución de los trabajos, no se descarta el empleo de otras metodologías como el cosido o el grapado.

Una vez restaurado, el puente tendrá un coste de mantenimiento anual de entre 6.000 y 8.000 euros, han detallado.