Actuar bajo los psicofármacos rebaja una pena por lesiones

El Día
-

El hombre, de 49 años, vecino de Calahorra, acusado de ser el presunto autor de los delitos de detención ilegal y lesiones contra una mujer, acepta 4 años y 3 meses de cárcel y la prohibición de aproximarse a su víctima durante 10 años

Sede del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja - Foto: Clara Larrea

Un hombre, de 49 años, vecino de Calahorra, acusado de ser el presunto autor de los delitos de detención ilegal y lesiones contra una mujer, ha aceptado este lunes cumplir una pena de 4 años y tres meses de cárcel y la prohibición de aproximarse a su víctima durante 10 años por ambos hechos delictivos al serle aplicada la atenuante de actuar bajo la influencia de psicofármacos.

Así consta en el acuerdo de conformidad habida en el juicio señalado este lunes en la Audiencia Provincial de Logroño contra el acusado, para quien el fiscal ha aplicado al imputado la atenuante analógica de anomalía o alteración psíquica, en el momento de los hechos, en octubre de 2018, y que en el escrito inicial no la había incluido.

Inicialmente, el fiscal pedía para este hombre una pena de 10 años de cárcel como presunto autor de delitos de detención ilegal, lesiones, amenazas y contra la integridad integridad moral.

En octubre de 2018, el imputado comenzó una relación de amistad con una mujer con la que había coincidido en la calle, y a la que ofreció residir en una vivienda que decía ser de su propiedad y que estaba vacía desde hacía tiempo, ya que ella no tenía ni documentación, ni dinero, ni tampoco donde dormir esa noche.

En esa vivienda, situada en Calahorra, permanecieron durante una semana, hasta que una noche el acusado salió de la vivienda y, cuando regresó, preguntó a la víctima por una papelina de anfetamina, la cual le respondió que no sabía; él se puso a buscarla y, al no encontrarla, enfureció de tal forma que rompió la vajilla.

El imputado, al no encontrar la papelina y con ánimo muy agresivo, quitó las botas a la víctima; la sentó a la fuerza en una silla; cogió un cuchillo, que le puso encima de la rodilla; la amenazó con un martillo y, al darse cuenta de que la denunciante pretendía huir, la ató a la silla, mientras seguía amenazándola con un cuchillo y un gancho de carnicero, diciéndola que la iba a desollar y desmembrar.

Después de hora y media aproximadamente en esas penosas condiciones, la víctima pudo librarse de las bridas; bajó las escaleras de la vivienda e intentó salir por la puerta sin conseguirlo, al no poder abrirla.

El imputado seguía gritando y amenazándola con un martillo, de forma intimidatoria, subiéndola de nuevo a la fuerza al piso superior, mientras le seguía diciendo "no vas a salir de aquí, no vas a ver a tu familia".

La víctima, presa de pánico, trató de nuevo de escapar del agresor y corrió hacia una ventana de la planta primera, que estaba abierta; consiguió descolgarse; se agarró a unos cables de la luz y cayó a la calle de cierta altura, que le provocó una fractura en el pie derecho.

La mujer fue atendida en el servicio de urgencias del Hospital de Calahorra, donde fue diagnosticada de fractura en el pie derecho, por lo que tuvo que ser intervenida quirúrgicamente y necesitó un tiempo de curación de 116 días, quedándole como secuela artrosis postraumática.

En el momento de los hechos, el imputado tenía sus facultades plenamente afectadas por el hecho de haber ingerido drogas y medicamentos -tranxilium y paroxetina, entre otros- de manera descontrolada en los últimos días.

Además, desde ese tiempo atrás, había estado en tratamiento psicofarmacológico por depresión y abuso de drogas.

Incluso, en los días y momentos anteriores a los hechos, el imputado le decía a la víctima con insistencia que "quería meterse en su cabeza".

El imputado, a través de la ayuda de su familia, ha consignado 2.000 euros a cuenta de la indemnización de la víctima y, desde el momento de su detención, el 26 de octubre de 2018 hasta este lunes, ha estado en prisión preventiva.

Los hechos que constan en el acuerdo de conformidad son constitutivos de una detención ilegal, por el que el imputado cumplirá una pena de 4 años de cárcel y una orden de alejamiento a la víctima durante 10 años; y un delito de lesiones, por el que cumplirá 3 meses de prisión.

En concepto de responsabilidad civil, el imputado indemnizará a la víctima de 15.019 euros, además de los gastos.