Valladolid y Logroño estaban citados el pasado 19 de septiembre pero un contagio en el conjunto riojano obligó a retrasar la cita del Huerta del Rey. Un mes después, con arbitraje de Sergio Rodríguez y Andrés Rosendo López, el conjunto riojano recupera a partir de las 20.30 uno de sus muchos duelos retrasados.  

Lo hace con una baza más en su equipo, la presencia de Jordan Bonilauri, pero con un contratiempo no menor: los jugadores de Miguel Velasco estarán obligados, por indicaciones de la Junta de Castilla y León, a llevar máscara en todos los partidos que jueguen en tierras castellanoleonesas.

La plantilla en las últimas sesiones ha tratado de entrenar esta ‘contingencia’ aunque la dificultad es mayúscula. Así lo entendía Miguel Velasco que recuerda que «es muy difícil jugar con máscara». «Lo vimos en el partido Ademar-Sinfín. No tardaba en descolocarse».

En lo estrictamente deportivo, Miguel Velasco recordaba las dificultades del encuentro de esta noche. «Es un equipo que está jugando bien y sacando buenos resultados. Le hemos visto ganar por doce en Huesca y por ocho al Cangas», enumeraba. Los vallisoletanos sólo han firmado dos tropiezos en seis jornadas, pero estos están justificados. «Pierden con el Barça y con el Nava por uno», apuntaba.

Pese a la incomodidad de jugar con mascarilla, el conjunto riojano confía en sumar su tercera victoria en liga. La primera llegó el ‘lejano’ 9 de septiembre (31-18) con el Nava y la segunda hace una semana en Santander (26-32). Los de Velasco aún tienen otros cuatro partidos por recuperar: Guadalajara, Bidasoa, Benidorm y Cisne.