El Deportivo no es el Superdépor pero sigue siendo un muy buen equipo. En apenas cinco minutos lo demostró para ponerse por delante e hipotecar la suerte de un encuentro que significó el segundo tropiezo consecutivo del Calahorra. El 0-3 resulta excesivo porque en la segunda mitad el conjunto coruñés apenas se prodigó en ataque. Con esta derrota, el Deportivo mantiene el liderato, con 9 puntos (además ve como el Real Unión, colíder, se queda a tres tras su pinchazo ante el Celta B) y el Calahorra se queda con solo un punto.

El encuentro amaneció torcido para los de Eduardo Docampo. Como en el Cerro del Espino, el conjunto de Borja Jiménez hizo diana en el primer remate. Alberto Quiles aprovechó la primera desatención local para firmar el 0-1. La primera parte fue coruñesa aunque los gallegos solo fueron capaces de anotar tras otra fallo múltiple en la zaga riojana. Aunque los rojillos reclamaron fuera de juego, Miku penalizó a los riojanos que con 0-2 se vieron incapaces de sacar algo positivo.

Tras la pausa, el Calahorra manejó el encuentro pero sin pegada. El técnico vizcaíno realizó un triple cambio que dio nuevos bríos al cuadro local pero la falta de mordiente ofensiva le volvió a pasar factura. El Deportivo especuló, reculó y amnestesió el partido. Mackaay apenas pasó apuros por mucho que Jorge Martínez Losa volvió a ser un incordio. El arnedano lo hace casi todo bien pero no tiene gol. Y cuando marca, como ante la UDL o el Deportivo, se lo anulan por fuera de juego.

Con el partido cumplido y el Calahorra, como en Majadahonda, buscando maquillar el resultado, el recién entrado Noel firmó el 0-3 definitivo. Demasiado quizás para un Calahorra que cierra su tour de force con 1 punto y ningún gol a favor (el del Cerro del Espino hay que consignarlo a la defensa majariega en propia puerta).