El domingo el IBSA Olímpico se proclamó campeón de la Superliga Femenina al derrotar en el set de oro al Alcobendas. De esta forma, la competición de voley femenino quedó resuelta en lo que respecta a la temporada 2020-21, la primera pospandémica. 

Con la adjudicación del título concluye una temporada en la que el Alcobendas se hizo con la Copa de la Reina y el Avarca Menorca como vencedor de la Supercopa de España. 

Por lo que respecta al Haro Rioja Voley, el equipo de Alberto Avellaneda, que no continuará la próxima temporada en la entidad azul, concluyó en séptima posición, quedándose sin opciones de luchar por el título de la Superliga Femenina.

Último y penúltimo fueron el Algar Surmenor y el Madrid Chamberí, respecticamente. Ambos equipos descienden a la Superliga Femenina 2. Su puesto en la elite será ocupado por el Barça, que regresa a la máxima competición tras proclamarse campeón de la Superliga Femenina 2. Le acompañan en el ascenso el Voley Playa Madrid, subcampeón.

Tras estos ascensos, la próxima temporada militarán en la máxima categoría el Alcobendas y el Voley Playa (ambos de Madrid), los canarios del IBSA, La Laguna y Sayre, los catalanes del Sant Cugat y el Barça, el Menorca balear, las gallegas del Emevé, las manchegas del Socuéllamos, las sevillanas del Cajasol Dos Hermanas y, por supuesto, el Haro Rioja Voley.