La Rioja lidera la caída de inversión en nuevas sociedades

Feli Agustín
-

Experimentó un descenso del 76% en 2020, tónica que se repite hasta febrero de este año

La Rioja lidera también este año la caída de inversión en nuevas sociedades - Foto: Óscar Solorzano

Los análisis y balances  realizados, tanto por la administración como por organizaciones privadas sobre diferentes variables, no hacen sino confirmar el importante efecto que sobre el ecosistema económico en general, y sobre las cuentas de resultados de las empresas en particular, tuvo la crisis sanitaria en 2020, unas repercusiones que perduran en el primer trimestre de este año.

A la espera de que la extensión de la vacuna minimice los desastres de la enfermedad, la incertidumbre sigue planeando sobre los inversores e impide que el dinero llegue a las compañías españolas. Así, según el estudio de Informa  D&B sobre Demografía Empresarial, la creación de empresas no alcanzó el año pasado las 80.000, con un capital invertido de cinco mil millones, cifras que no se registraban desde 2009. Fueron construcción y actividades inmobiliarias y hostelería los sectores que mayor frenazo registraron en un año en el que la moratoria concursal, aplazada hasta este mes de abril, también provocó que las firmas que se sometieron a este proceso se situaran en mínimos desde 2008, con un total de 4.376.

Así pues, la variación en la creación de nuevas empresas experimentó un retroceso en nuestro país del 15,79%, descenso que fue en La Rioja del 22,15%, el mayor del país, a excepción de la ciudad autónoma de Ceuta. Se crearon 355 sociedades frente a las 456 de 2019, ejercicio en el que el ámbito empresarial riojano se mostró muy dinámico, pues el nacimiento de nuevas sociedades creció un 12,87%, frente al retroceso del 1,6% en nuestro país. Construcción y actividades inmobiliarias, seguido de comercio, lideraron las nuevas sociedades -con 79 y 70-, por delante de las 39 de servicios empresariales, e industria, con 32. En 2019, fueron también comercio, con 86, y servicios inmobiliarios, con 83, los sectores que encabezaron los nuevos nacimientos.

Menos dinero. A la relevancia de esta caída se suma el batacazo en el capital invertido, que fue del 76,50%, al pasar de los 53 millones de 2019 a los 12,5 del año pasado, cuando el descenso global en España fue muy inferior, del 9,1%. La Rioja es así la comunidad que experimentó mayor caída en un ejercicio donde hubo comunidades, como Extremadura, con un 111%, o Aragón, con el 81,1%, que marcaron una tendencia muy positiva. En el caso de La Rioja, el dato contrasta con el del ejercicio precedente, cuando el crecimiento había sido del 48,8%.

Estas cifras no han mejorado este año, pues se refleja hasta  febrero un descenso de creación de empresas del 16,2 % -de 70 a 51-, y esta comunidad sigue encabezando la caída de capital invertido, del 70% -438.000 euros frente a 1,9 millones- en un periodo muy dinámico en algunas comunidades, que arroja una subida global del 65,3%.

Por lo que respecta al número de disoluciones, en 2020 se produjeron 139 frente a las 166 del ejercicio precedente, una característica general a todo el país;la mayoría corresponden a comercio y actividades inmobiliarias. Mientras, el número de concursos creció en cuatro, de 18 a 22, a pesar de la caída general;la mayoría, 7, correspondieron a comercio.

El presidente de la Federación de Empresas (FER), Jaime García-Calzada, resalta que el año pasado «sufrimos  desde marzo una fuerte crisis por la pandemia, con cierres, restricciones y limitaciones y, por lo tanto, se trata  en un contexto económico muy poco propicio para poner en marcha nuevos proyectos empresariales». No obstante, recalca que los datos porcentuales tanto de constituciones como de disoluciones «son algo peores en La Rioja que en el conjunto del país», circunstancia que atribuye a que «cualquier aumento o reducción en una comunidad tan pequeña como la nuestra tiene una mayor incidencia en el porcentaje final». Así las cosas, insiste, a la luz de  este tipo de estadísticas e informes, en que sería necesario realizar una valoración en un periodo de tiempo más amplio, lo que no es óbice para que el estudio evidencie una situación de crisis económica y empresarial derivada de un contexto sanitario desconocido, «que  afecta de manera similar a La Rioja que al resto del país».