La Fuente Murrieta y el Revellín se iluminarán de verde

El Día
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El Ayuntamiento de Logroño quiere celebrar con ese gesto el Día Mundial del Medio Ambiente

Una familia en el embalse de La Grajera en una foto de archivo - Foto: R. Lafuente

El Ayuntamiento de Logroño ilumina de verde este viernes y el sábado la Fuente Murrieta y el Cubo del Revellín con motivo de la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente.  

La Concejalía de Medio Ambiente, con motivo de esta conmemoración y dentro de la programación de la Semana Verde Europea, también ha organizado mañana una jornada de puertas abiertas con grupos reducidos al Parque Municipal de Jardinería en la que se han inscrito más de un centenar de personas.  

En estas visitas las personas que han reservado plaza podrán conocer la planta de compostaje, en la que se produce prácticamente la totalidad del abono que se usa en las zonas verdes de Logroño a partir de los restos de poda, siegas y hojas caídas; el Punto Limpio Verde, en el que la ciudadanía puede depositar sus residuos verdes privados; la rosaleda didáctica, una zona de viñedo experimental destinada a preservar variedades autóctonas minoritarias y genes de vid, un jardín de los sentidos de 2.750 m2 y un jardín botánico, de más de 30.000 m2 con una representación de diferentes ecosistemas presentes en La Rioja, con más de 70 especies, zonas estanciales, miradores, olivos centenarios, almendros y otros árboles.  

Asimismo, El Aula Didáctica de La Grajera celebra este fin de semana el Día Mundial del Medio Ambiente con el taller ‘Juegos en la naturaleza’, con los que se difundirán diferentes aspectos de la naturaleza de forma lúdica y divertida.  

 

Día Mundial del Medio Ambiente. 

De acuerdo con Naciones Unidas, “durante demasiado tiempo, hemos estado explotando y destruyendo los ecosistemas de nuestro planeta. Cada tres segundos, el mundo pierde una superficie de bosque equivalente a un campo de fútbol y, tan solo en el último siglo, hemos destruido la mitad de nuestros humedales. El 50% de nuestros arrecifes de coral ya se han perdido y para 2050, podrían desaparecer hasta el 90%, incluso si el calentamiento global se limita a un aumento de 1,5°C”.  

La pérdida de los ecosistemas está privando al mundo de sumideros de carbono, como los bosques y las turberas, en un momento en que la humanidad ya no puede permitírselo. Las emisiones globales de gases de efecto invernadero han aumentado durante tres años consecutivos y el planeta está a un paso de un cambio climático potencialmente catastrófico.  

La aparición de la COVID-19 también ha demostrado lo desastrosas que pueden ser las consecuencias de la pérdida de ecosistemas. Al reducir el área de hábitat natural para los animales, hemos creado las condiciones ideales para que los patógenos, incluidos los coronavirus, se propaguen.  

Ante este gran problema, este año el Día Mundial del Medio Ambiente se centra en la restauración de ecosistemas con el lema "Reimagina, recrea, restaura". Solo con ecosistemas saludables se pueden mejorar los medios de vida de las personas, contrarrestar el cambio climático y detener el colapso de la biodiversidad.  

Restaurar los ecosistemas significa prevenir, detener y revertir este daño, pasar de explotar la naturaleza a curarla. Para ello, y precisamente en este día, arranca el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030.  

El Día Mundial del Medio Ambiente 2021 exige acciones urgentes para devolverle la vida a los ecosistemas dañados de los que depende la superviviencia de las personas. La restauración de los ecosistemas es una tarea global de una escala gigantesca. Supone reparar miles de millones de hectáreas de tierra para que la gente tenga acceso a alimentos, agua potable y empleos. Significa lograr que vuelvan plantas y animales que hoy están al borde de la extinción, desde las cimas de las montañas hasta las profundidades del mar.  

Pero, también incluye muchas pequeñas acciones que la ciudadanía puede realizar todos los días: cultivar árboles, reverdecer las ciudades, repoblar los jardines con especies silvestres o limpiar la basura de los ríos y costas.  

La restauración de los ecosistemas conlleva beneficios sustanciales para las personas. Por cada dólar invertido en restauración, se pueden esperar al menos entre siete y treinta dólares en ganancias para la sociedad. Además, la restauración también crea empleos en las zonas rurales, donde más se necesitan.