Ahora más que nunca es necesario demostrar «altura de miras» y capacidad para llegar a acuerdos para hacer frente a las consecuencias de la pandemia. Esa es la reivindicación de la Cámara de Comercio de España, verbalizada ayer por su presidente, José Luis Bonet, que reclamó al Gobierno y a los grupos políticos la extensión de medidas como los ERTE y unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) que demuestren estabilidad institucional y refuercen la credibilidad del país en el exterior.

Así lo señaló en la inauguración del Pleno Extraordinario Recuperación y reconstrucción de la economía española: desafíos y prioridades, organizado por la entidad en Palma de Mallorca.

«En la colaboración público-privada está la clave para salir airosos de este trance, sin participación activa de las empresas, no habrá salida de la crisis», advirtió.

En esta línea, el presidente de la Cámara de España pidió que el plan de recuperación vele por las personas, pero también por las empresas, dado que, como apuntó, son «la pieza clave para la recuperación y la creación de empleo».

En el terreno económico, consideró prioritario mantener y ampliar algunas de las medidas que el Ejecutivo ha aplicado para luchar contra la crisis de la COVID-19, como una nueva prórroga en la aplicación de los ERTE o la extensión de los períodos de carencia y amortización de los avales.

De la misma manera, exigió instrumentos que ayuden a las pymes a cumplir con las obligaciones financieras adquiridas para asegurar su viabilidad, y puso de manifiesto el «sólido compromiso» de las Cámaras de Comercio de apoyar al tejido productivo, y muy particularmente a las pymes, para salir adelante de la mano de las grandes.

Impulsar la recuperación

Mientras, la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, mantuvo que los instrumentos puestos en marcha para hacer frente a la pandemia han impulsado la reactivación económica y que se van a adaptar para seguir haciéndolo lo que queda de año y principios de 2021.

Y es que, para la vicepresidenta, el Gobierno ha hecho lo correcto para tratar de minimizar el gasto estructural y contar con una base «fuerte» para la recuperación. De hecho, cree que es de «vital importancia» el Plan de Transformación y Resilencia en el que está trabajando el Ejecutivo, con el fin de tener bien estructurado el «armazón» que permita al país contar con la inversión pública y privada para abordar los procesos de transformación que la economía necesita.

De hecho, Calviño puso en valor que se ha evitado que la caída del PIB haya superado el 25% este año. Además, recordó que tras el fuerte descenso de este indicador en el segundo trimestre, en el tercero el Gobierno espera que haya una recuperación superior al 10%.

«Nos quedan meses complicados y un largo camino por delante, pero esperamos que lo antes posible haya una vacuna para dejar de lado esta situación», concluyó.