El artista riojano José Antonio Olarte ha ampliado su colección de grabados del proyecto artístico que comenzó en 2020, una serie limitada de 500 grabados e inspirada en la obra del pintor Diego Velázquez, 'La rendición de Breda', con dos nuevas creaciones en su búsqueda por "democratizar el arte".

Así lo ha detallado en una entrevista con Efe este escultor, que lleva más de 25 años de trabajo, aprendizaje y compromiso con su obra, sobre todo, escultórica, que le ha permitido elaborar pinturas matéricas y esculturas en diferentes formatos y materiales, como hierro, bronce o madera, creadas con lenguaje sobrio y sintético.

Con estas dos nuevas creaciones en grabado, José Antonio Olarte (Haro, 1968) amplía su proyecto artístico de 2020, que pasa de 5 a 7 variaciones distintas del cuadro de Velázquez.

Estos dos nuevos tipos de grabados tienen un tercio de su superficie hecha a base de color y textura, mientras que el resto de la composición está creada con picas horizontales, que van de izquierda a derecha y de derecha a izquierda, ha detallado.

También destacan porque tienen más color que las cinco que realizó en 2020, aunque "mantienen los mismos elementos".

"Cada grabado -ha precisado- es una pieza única", ya que "la técnica de creación con todos los elementos impresos de uno en uno hace que cada uno de ellos tenga su personalidad y sea diferente de todos los demás".

Para él, estos grabados constituyen una forma de "democratizar el arte" para que "más gente de la habitual se acerque al arte y tenga la posibilidad de iniciarse en el coleccionismo".

También ha explicado que "tener arte en propiedad no es fácil", ya que "falta educación; los espacios donde trabajan los artistas no son accesibles y la gente tiene miedo a entrar en las galerías de arte porque son espacios poco fáciles para relacionarse".

Además de estos dos nuevos grabados, ha diseñado nuevos trabajos basados en su obra escultórica, tanto la existente como bocetos de sus proyectos.

Se trata de dos grabados inspirados en sus obras sobre el Camino de Santiago para Logroño: la 'Vieira' de bronce y 'Naves de paso'; en su escultura '42,195', que es "un homenaje a la disciplina olímpica por excelencia, la maratón"; y en su obra '364+1', "una reflexión sobre el paso del tiempo".

Los grabados de la 'Vieira' de bronce, ha relatado, surgieron por una visita de un grupo de peregrinos, en la que uno quería regalar a cada uno una réplica de la escultura, pero "el bronce es un proceso caro, así que le busque una solución y le hice un grabado".

Sobre sus nuevos proyectos, ha adelantado que prepara la exposición 'Esculturas habitables', que expondrá en el Ateneo de Madrid del 1 al 15 de noviembre de 2022, "una sala emblemática", a la que volverá después de 18 años, y en la que expusieron "Alberti y toda su generación", y que ha sido renovada.

Esta exposición es una reflexión sobre la escultura como función y tiene como materiales principales dos clásicos en la obra del artista, el hierro y la madera, ha indicado.

Se completará con escultura, pintura y arquitectura, que hacen que esta muestra "cobre una nueva dimensión, ya que las esferas, que representan al planeta Tierra, van a tener un protagonismo central", ha informado y ha indicado que, a partir de ahí, "la idea es ir desarrollando una serie de formas que tengan que ver con los espacios habitables".

Según Olarte, la escultura y el arte no cumplen una función práctica, pero en este caso, "una escultura se puede transformar en un espacio habitable y puede ser una referencia física para transformar el objeto en el que habitar, y metafísica, porque se necesita un espacio donde vivir y mantener la identidad".

"Este tema se ha hecho muy actual porque ha habido un confinamiento (por la pandemia) y, para confinarse, hay que tener una casa", ha dicho Olarte, a quien le pareció "muy interesante asumir el compromiso" de ese proyecto porque es una motivación para las personas que nos dedicamos al mundo del arte", ha concluido.

Entre sus obras más significativas están, por su simbolismo, 'Naves de Paso', escultura de gran formato ubicada en Avenida de Burgos y que constituye la puerta oeste de la ciudad de Logroño; '364 +1', instalación realizada para la exposición 11111 en el Brescia Musei de Brescia en Italia; o 'Espacio compartido', en el Hotel Solar de Febrer (Tirgo).