Adiós a Segunda nueve meses después

M. A. G-S.
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La UDL cae con estrépito ante Las Palmas y jugará el próximo año en Primera RFEF; todo lo que podía salir mal, salió peor en Las Gaunas

Adiós a Segunda nueve meses después

Ficha técnica:

 

UDL: Roberto Santamaría, Unai Medina, Álex Pérez, Clemente (Siddiki, 77), Iñaki, Andy, Petcoff (Roni, 46), Paulino (Rubñen Martínez, 67), Olaetxea, Pacheco (Bogusz, 57) y Nano Mesa (Leo Ruiz, 56).

Las Palmas: Álex Domínguez, Lemos, Curbelo (Coco, 79), Cardona, Sergi Cardona (Ale Díez, 46), Juan Fernández (Clemente, 67), Kirian, Sergio Ruiz, Maikel, Mújica (Aridai, 67) y Edu Espiau (Jesé, 46).

Árbitro: Arcediano Monescillo (colegio castellano y manchego). Amonestó a Iñaki y Olaetxea así como a Juan Fernández, Sergi Cardona y a Maikel.

Gol: 0-1, M. 74: Aridai, a la escuadra.

Incidencias: último encuentro de la temporada correspondiente a la jornada cuadragésimo segunda disputado en Las Gaunas sin público.

 

Nueve meses ha durado la aventura de la Unión Deportiva Logroñés en Segunda. En la última jornada, los blanquirrojos se condenaron al descenso tras una pésima segunda vuelta. Un gol imparable de Aridai, a falta de un cuarto de hora, condena a los de Sergio Rodríguez a la Primera RFEF.

 

Alcorcón y Lugo hicieron lo que debían, por improbable que pareciese. El Sabadell también lo hizo pero como los logroñeses, no dependían de sí mismos y dicen adiós a Segunda. Al igual que el Castellón. De los ascendidos en julio, sólo el Cartagena supo aclimatarse a la categoría.

 

La despedida de los riojanos fue triste. Como casi todo desde el 29 de noviembre, fecha en la que se acabó la racha infinitiva en Son Moix (4-0). Desde ese momento, los blanquirrojos opositaron a un descenso que se ha consumado con una derrota con la que no había contado. No hubo ni toque a rebato porque los riojanos no tienen gol. Nunca lo han tenido, ni cuando se asomaron a los puestos de privilegio.

 

Aunque Las Palmas comenzó respondón, los riojanos no tardaron en controlar el ímpetu canario. Unai Medina, convertido casi en extremo, lo intentó desde la distancia en un encuentro abierto desde su inicio. Clemente, repescado para la ocasión, tuvo la más clara pero cabeceó alto, con todo a placer, el segundo córner botado por los riojanos en apenas seis minutos. Todas las disputas eran blanquirrojas aunque los de Pepe Mel se replegaban con orden y salían con rapidez a la contra. Edu Espiau remató desde la frontal ligeramente desviado en el primer aviso amarillo.

 

Los buenos principios no duraron mucho. A partir del cuarto de hora, Las Palmas manejaba la situación y solo una internada de Iñaki despertó a los de Sergio Rodríguez que, en el minuto 20, tuvo la ocasión más clara. De un balón de la nada, Nano Mesa se plantó ante Álex Domínguez que hizo la estatua y el tinerfeño remató al muñeco.

 

El remate del delantero blanquirrojo no tuvo continuidad y el primer acto se fue diluyendo. La pelota era local aunque su circulación era horizontal y cuando había verticalidad, no había velocidad ni insidia. Iñaki, en una falta desde la frontal, probó fortuna pero Álex Domínguez desbarató todo peligro. El lanzamiento coincidió con el tanto de Manu Barreiro en Vallecas. Los riojanos necesitaban dos goles para salvarse (uno propio y otro del Rayo).

 

La UDL llegó al descanso sin goles tras un cabezazo desviado de Nano Mesa. El fútbol blanquirrojo no daba para más. Y encima nada de lo que sucedía en Alcorcón o Vallecas ayudaba. Quedaban 45 minutos para reaccionar y esperar una ayuda.

 

Aunque Sergio Rodríguez apostó tras la pausa con Roni, el miedo atenazó a los riojanos, incapaces de doblegar a un Las Palmas que aunque no creaba peligro controlaba los tiempos. En cualquier caso, Jesé amenazó con un remate demasiado fácil para Roberto Santamaría que, como siempre, aguantó en su sitio. Con poco, el navarro era ya el mejor del partido.

 

Con poco más de media hora por resolverse, el técnico logroñés renovó todo su ataque con Bogusz y Leo Ruiz. Casi toda la pólvora blanquirroja estaba sobre el césped. Los riojanos estaban tocados. Las Palmas, sin atreverse a ir a por la victoria, desquiciaban a su rival escondiendo la pelota. El tiempo se agotaba y la permanencia se esfumaba.

 

Solo a balón parado era capaz la UDL de estirarse y Clemente, como en el primer tiempo, tuvo el gol. Remató sin fe y la mandó fuera. Era lo más difícil. La oportunidad dinamitó el encuentro que se rompió. Los logroñeses entraban en la ‘zona Fuenlabrada’. Como ante los madrileños, era el momento de la verdad. Quedaban veinte minutos para reservar un billete para el purgatorio o para el infierno.

 

Pese a las embestidas de Bogusz, Las Palmas no se desesperó, bajó el balón al suelo y trató de matar el partido. Lo hizo por mediación de Aridai, que se asoció con su compañero, la pisó y la puso en la escuadra. Un golazo que descendía a los riojanos.

 

Los blanquirrojos lo intentaron con todas sus fuerzas, que no eran muchas. No hubo ni épica ni milagro. Leo Ruiz lo probó, también Rubén Martínez pero el destino estaba escrito. La Primera RFEF aguarda a la Unión Deportiva Logroñés. El 24 de marzo Félix Revuelta trató de tranquilizar a los aficionados asegurando que si se bajaba no pasaba nada. Dos meses después no hay consuelo para tanta amargura.