El hospital San Pedro habilita otras 12 camas UCI

Víctor Zurrunero
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Ante las previsiones de aumento de la presión asistencial, Salud pone en marcha el II Plan de Contingencia de Intensivos que despliega hasta 55 camas de críticos

Imagen de una cama UCI del hospital San Pedro. - Foto: Clara Larrea

El sistema sanitario está sufriendo desde hace días los efectos del aumento exponencial de contagios que se están produciendo en las primeras semanas del mes de enero. Por ello,Salud habilita 12 camas UCI adicionales en la zona de Reanimación, para ampliar la capacidad de atención a los pacientes críticos hasta las 55 camas. Una medida contemplada en la segunda fase del Plan de Contingencia de Intensivos, puesto en marcha en el Hospital San Pedro. «Las previsión es que esto vaya a más, por eso habilitamos más recursos», apunta Javier Pinilla,  director de Asistencia Hospitalaria del San Pedro. 

Y es que la Unidad de Cuidados Intensivos también está notando el incremento de la presión, y ayer, contaba con un total de 42 pacientes ingresados, 35 con coronavirus y 7 con otras patologías.  Para poder afrontar la previsible demanda asistencial que está por venir, tanto en planta como en Cuidados Intensivos, el Hospital San Pedro ha comenzado a adaptarse,  destinando un nuevo control en la quinta planta para enfermos Covid y habilitando más espacios dedicados a camas UCI, con la puesta en marcha del segundo Plan de Contingenciade Intensivos. A nivel de Cuidados Intensivos, el Hospital San Pedro dispone, de forma estable de 32 camas, distribuidas entre la Unidad de Medicina Intensiva (UMI) con 17 y el Área Polivalente de Críticos -puesto en marcha en mayo del año pasado-  con 15 más. 

Recientemente se ha habilitado la zona de UMI de Coronarias que cuenta con 7 camas, ampliable a 11. A esto, se suma ahora, con el segundo nivel del Plan de Contingencias de Intensivos, las 12 camas adicionales, habilitadas en el área de Reanimación. Con esto,  Salud despliega hasta 55 camas para críticos -igualando el número máximo habilitado durante la primera ola- destinadas tanto para pacientes Covid como pacientes con otras patologías, con la intención de poder afrontar las necesidades que puedan surgir en las próximas semanas.

 «Tenemos previstas más fases del Plan de Contingencia, pero no querríamos llegar», apunta Pinilla, «porque emplear más espacios para Intensivos, sería en detrimento de la actividad  quirúrgica, algo que no queremos».

El aumento de la presión asistencial también está afectando a la  distribución y organización de las plantas del Hospital San Pedro. Ayer se habilitó un nuevo control de la quinta planta destinado a pacientes con coronavirus. Con este ya son cinco los controles dedicados a atender enfermos de la Covid-19, uno en la séptima planta, dos en la sexta, y otros dos en la quinta. «Esto deriva en un grave problema de ubicación de pacientes a plantas Covid por falta de camas»,  alerta Pinilla. 

Efecto de las restricciones. Para proteger el sistema sanitario, el Ejecutivo regional elevó el miércoles el nivel de restricciones, con el confinamiento perimetral de los municipios, el cierre del comercio no esencial y la prohibición de reuniones sociales entre no convivientes. Unas medidas que han entrado en vigor hoy, y que se prolongarán hasta el 23 de febrero. 

Reducir la movilidad «es una medida eficaz», afirma Vicente Soriano, médico especialista en Enfermedades Infecciosas, ya que reduce la interacción con gente distinta, las personas contagiadas no pueden transmitir el virus y se cortan las cadenas de transmisión. 

«Estamos viendo ahora los efectos de la movilidad que hubo en Navidad», recuerda Soriano, que apunta, que habrá que esperar al menos una semana  para notar los efectos de las restricciones. «Lo esperable es conseguir que la curva de contagios dibuje una meseta».