El nuevo centro de La Villanueva estará contemplado en la nueva estrategia de Primaria que prepara la Consejería de Salud, y que quedará establecido en el nuevo plan que, tras sufrir un ligero retraso, estará lista a lo largo de este semestre para su inmediata aplicación. Así lo avanza el gerente del SERIS, Alberto Lafuente, que afirma que tiene dos objetivos principales: paliar la falta de profesionales que, destaca, no es un problema exclusivo de La Rioja, sino que es común a todo el país; además de adaptar la Atención Primaria a las exigencias del siglo XXI, a las necesidades y funciones que ha adoptado, sobre todo a raíz de la pandemia. «Nosotros defendemos que la sanidad debe transformarse para que la atención al paciente cambie y sea capaz de colocar a la persona en el centro de todo y, a partir de ahí, ofrecer un servicio integral, de mayor calidad y más humanizado», indica Lafuente, que asegura que esta es la pretensión que se persigue con la transformación de la Primaria, la puerta de entrada al sistema para la mayoría de pacientes.
Actividad de 2020. La pandemia obligó el año pasado a un esfuerzo suplementario a este servicio, cuyos profesionales aumentaron sus atenciones, tanto en consulta como en casa.
Así, los médicos de familia en Logroño realizaron 691.260 consultas el pasado año, tanto en el centro de salud como a domicilio (676.243 en 2019), con una media de pacientes diarios atendidos de 30,7. Los pediatras, por su parte, registraron 101.639 consultas y las enfermeras, 475.853, tanto en el centro de salud como en las casas de los pacientes, la asistencia que más creció, un 18%, respecto al ejercicio precedente. En los centros se llevaron también a cabo 49.202 sesiones de fisioterapia, 14.807 consultas de matronas y casi 10.000, trabajo social.
Logroño cuenta con ocho centros de salud -Siete Infantes de Lara, Cascajos y La Guindalera se han incorporado desde 2002-, donde trabajan 91 médicos de familia y 22 pediatras.
La población adulta asignada a cada médico de familia era en 2020 de 136.752, de tal manera que el promedio de pacientes por facultativo es de 1.493 personas. En el caso de los menores, se contabilizaban 20.737, lo que supone 958 por pediatra. La frecuentación al médico oscila entre las 5,6 veces al año que acude un usuario del Joaquín Elizalde a las 4,04 a La Guindalera. En el caso de Pediatría, la más baja se produce en Cascajos con 4,19 y la más alta (5,6) en Labradores.