Zubizarreta antes que Irribarria

M. A. G-S.
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Darío Gómez se mide el viernes en octavos en Ataun al debutante; el ganador retará al actual campeón en cuartos

Darío Gómez. - Foto: Clara Larrea

El Manomanista asoma en el horizonte y lo hace, tras un par de semanas de suspenso, con el frontón de Ataun inaugurando las rondas de octavos de final. Será este viernes, a partir de las 19.30 horas, y contará con la presencia de Darío Gómez como uno de los aspirantes a la txapela más prestigiosa de la pelota. El ezcarayense de medirá en la localidad guipuzcoana a Iraitz Zubizarreta (Ataun, 1999), delantero que ejercerá de local y que se estrena en una cita de primera nivel cuando apenas lleva un mes como profesional.

Darío Gómez y Zubizarreta están ante la oportunidad de su vida. El ganador avanzará a cuartos de final, ronda en la que espera Iker Irribarria, actual campeón de la distancia. «Junto con la final del Manomanista de Segunda del año pasado, en el que estaba en juego la renovación, este es el partido más importante que voy a jugar», informaba.

El riojalteño, además, se consideró afortunado por el sorteo. «Estaba en el mismo bombo que Altuna, Bengoetxea, Jaka o Zubizarreta.  Quizás de los que me podían tocar, sí he tenido fortuna», apuntaba.

En cualquier caso, y pese al premio que aguarda al que llegue al tanto veintidós, Darío Gómez no quiere pensar más allá del viernes. El riojano sabe que «será un partido de mucho trabajo» para el que se ha preparado a conciencia. Desde su victoria ante Peio Etxeberria, ha preparado con mimo este encuentro «pero sin forzar».

Zubizarreta acaba de velar armas en el profesionalismo pero no por ello será un rival fácil. Así lo entiende Darío: «Es un pelotari muy duro, con mucho ritmo. Igual no tiene un gran golpeo pero sabe acabar el tanto, enredar y trabajar mucho».

El de Ataun será el primer encuentro entre el riojano y el guipuzcoano. Darío, pese a que suma más partidos en la distancia, recela de la condición de favorito. «No lo sé. Es una cosa que no me importa, la verdad. El ser favorito no te da ningún tanto y si algún nervio más», bromeaba.

Pero además de este duelo que inaugurará la ronda de enfrentamientos de octavos de final, en Bilbao quedó ayer resuelto el cuadro final de un torneo cuya final se resolverá el 29 de noviembre en el Miribilla bilbaíno.

El Manomanista ofrecerá el sábado en la localidad alavesa de Amurrio el duelo en el mano a mano entre Bengoetxea y Agirre. El vencedor de esta contienda retará en cuartos de final a Elezkano II, cabeza de serie.

La ronda de octavos se completará el domingo en el Astelena eibarrés con una doble cita. Jaka se medirá a Bakaikoa. El que llegue a veintidós se citará con Urruti, subcampeón. Además, Ezkurdia espera al ganador del Altuna-Peña II.