El Gobierno prevé que se dispare el déficit del transporte

Bárbara Moreno
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La Administración sufraga el coste del metropolitano, interurbano y rural que al año tiene un déficit de 2,6 millones. Tras la pandemia la ocupación aún está al 40% respecto a marzo

Un autobús del servicio Metropolitano circula por Alberite. - Foto: El Día

El Gobierno de La Rioja es quien paga el déficit por la explotación del transporte público de autobuses en las tres líneas: tanto metropolitano, como interurbano como rural. Y si cada año hay déficit, el de este año se disparará, explica el director general de Infraestructuras del Gobierno de La Rioja, Vicente Urquía, quien añade que es imposible saber ahora cuánto dinero podría ser, pero, a tenor de la pandemia por COVID, del confinamiento y la imposibilidad de movimientos entre municipios, y después de esto de las limitaciones y de que tampoco hay mucho más movimiento por miedo, se temen que el gasto este año sea mucho mayor. De hecho a día de hoy, el uso es de un 60% menos de ocupación. Eso sí, según anunció el Gobierno de España la semana pasada, se va a dedicar una partida especial para sufragar el gasto del transporte público a las comunidades con un importe de 800 millones de euros. Y a La Rioja podrían llegar, según cálculos aproximados de la Administración, unos 2,5 millones.

En realidad, como explica Urquía, el movimiento en estos transportes va mejorando poco a poco, pero no al ritmo que les gustaría. 

Los tres servicios funcionan con contratos de servicio público como concesiones. Se saca a concurso cada servicio por cada línea. En el caso del metropolitano todas las líneas se sacan en un mismo concurso. El interurbano, que son 14 líneas, hay 14 concesiones diferentes, y el rural, que hay 5 líneas se licita y adjudica en un solo contrato.

Todas las líneas son deficitarias. Se trata de un sistema en el que las empresas tienen una explotación y unos costes. A los costes de explotación que se audita por parte de la Administración se le restan unos ingresos por la venta de los billetes. Y todos los años arrojan un déficit. «Porque todas las líneas son deficitarias», explica Urquía, ejemplificando con que la línea que menos déficit tiene es por ejemplo la de Logroño-Villa de Ocón, y la que más Logroño-Najera. Por ejemplo en 2019 se pagaron en total 2,6 millones de euros por el déficit de todo el transporte durante 2018. El déficit de las interurbanas se pagan anualmente y las otras (metropolitano y rural ) de forma trimestral. 

Reducción de viajeros. Lo que está claro es que el número de viajeros ha caído drásticamente durante todo el confinamiento. Atendiendo a los datos que expone el director general, en cuanto al metropolitano por ejemplo, si el 4 de marzo teníamos 2.360 viajeros diarios (fecha anterior al confinamiento), en los peores días por ejemplo el 1 de abril, bajó a 295 viajeros al día, y ahora, el 15 de junio, tuvo 1.122 viajeros. Es decir, que la cifra aún está al 50% de la normalidad. 

En cuanto al interurbano, poniendo como ejemplo las líneas que lleva uno de los adjudicatarios, Jiménez, si un día normal tenía 1.195  en el peor día, 1 de abril, bajó a 40, y ahora cuenta con 474, es decir, que ha bajado un 60% (cifra que se da en las líneas de Rioja Baja)

Y poniendo como ejemplo otra línea del interurbano, por ejemplo la que gestiona Rioja CAR con la línea de Logroño a Nájera, contaba al día con 452 pasajeros (antes del confinamiento), bajó a 18 el día que menos ha tenido en la pandemia, también en los primeros días de abril, y ahora cuenta con 210 pasajeros diarios, es decir, un 54% menos de ocupación. 

Urquía explica que el usuario del transporte público, normalmente son estudiantes, una buena parte de jubilados que ya no llevan el coche y mujeres. Y en el caso de los estudiantes es lo que más se ha paralizado porque no han retomado las clases algunos niveles. 

Problema en el rural. Y en cuanto a los viajeros de una semana en el transporte rural (que explota Autobuses Jiménez) son 180 en la semana de marzo y en la semana pasada fueron 34 viajeros, menos de cinco pasajeros al día, (lo que supone un 80% menos).

En realidad, en cuanto al transporte rural, hay un problema añadido, que se usa muy poco, y desde el Gobierno están buscando cómo se podría gestionar, pero, el gran problema es que el contrato actual es hasta el 2028. Y si se rescinde habría primero que pagar a la empresa. Se ha barajado incluso hacer el servicio a demanda, e incluso se ha hecho durante el confinamiento, pero no ha funcionado bien.

En cuanto al pago que se tenga que hacer a partir de ahora y durante este año, habrá que paliar esta bajada de pasajeros que aún está al 40% de ocupación, y donde no ha habido expediciones también hay que pagarlo, porque hay que amortizar los vehículos aunque no hayan gastado gasolina. Porque hay que pagar los gastos estructurales como la amortización del vehículo si se ha comprado.

Pero, ¿cuándo se llegará a la normalidad en el transporte público? Pues como en otras cuestiones, no hay respuesta aún.  Urquía teme que durante este año el uso del transporte no remonte, porque cree que hay miedo y se desconoce cómo se va a comportar el pasajero. Eso sí, ellos proponen una seguridad total en los transportes públicos respecto al coronavirus y animan a que los riojanos hagan uso de él. «Vemos muy importante y necesario que la gente coja el transporte público con normalidad y con seguridad. Que la gente tenga la seguridad que los autobuses se desinfectan y que se va a hacer un protocolo».  Lo cierto es que se había avanzado mucho en el uso del transporte público y por ejemplo el año pasado el uso del metropolitano por ejemplo aumentó en un 7,62%, y el interurbano aumentó un 7,36%.  «Y también supone reducción de contaminación. Si todo el mundo empieza a coger el coche y aumenta la contaminación, será peor». 

Por otro lado, desde la Dirección de Infraestructuras también quieren destacar que hay subvenciones para que se use más el transporte público y que estudiantes o personas de más de 65 años solo pagan 50 céntimos por el uso del autobús. Y eso cuesta 250.000 euros al Gobierno de La Rioja porque va subvencionado con una partida específica.