Cebollera renueva su certificado Q de Calidad Turística

El Día
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El consejero de Sostenibilidad y Transición Ecológica, Álex Dorado, ha recibido este certificado durante la entrega de los Premios Q de Calidad Turística, presididos por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto

Un ciervo se mueve entre los pinos en Sierra Cebollera. - Foto: Ingrid

El Parque Natural Sierra de Cebollera de La Rioja ha renovado su certificado Q de Calidad Turística, que “aporta prestigio, diferenciación y fiabilidad a un entorno natural privilegiado, y contribuye a promocionar este espacio rico en biodiversidad para atraer turismo sostenible”.

Así lo ha afirmado el consejero de Sostenibilidad y Transición Ecológica, Álex Dorado, quien ha recibido este certificado durante la entrega de los Premios Q de Calidad Turística, presididos por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha informado este viernes el Gobierno de La Rioja en una nota.

El turismo, ha proseguido Dorado, “fomenta el desarrollo socioeconómico de la zona y la fijación de población en el territorio”, que, ha recordado, cuenta con “un centro de interpretación adaptado a las necesidades de las personas con discapacidad visual".

La marca de garantía Q Calidad Turística es una marca española que certifica, en este caso, la implantación de un sistema de gestión en el Parque Natural Sierra de Cebollera y en su centro de interpretación, orientado al servicio del cliente y a la mejora continua.

Este espacio riojano ha pasado unas estrictas auditorías que aseguran que la prestación del servicio es garantía de calidad, seguridad y profesionalidad, todo ello, para asegurar a los usuarios una buena experiencia turística.

El Parque Natural Sierra de Cebollera pertenece a la Red Natura 2000, destaca por sus valores ecológicos y paisajísticos, y tiene una extensión de 23.640 hectáreas que incluye los municipios de Villoslada de Cameros y Lumbreras, con las aldeas de San Andrés y El Horcajo, que tienen una población conjunta próxima a los 500 habitantes.

Se trata de un paisaje que ha recuperado los bosques después de siglos de actividad intensa de la trashumancia en las tierras de Cameros, una cultura tradicional que ha dejado su huella integrada en el nuevo paisaje a través de corrales, chozos pastoriles y ermitas.

Además, este espacio natural protegido dispone de un centro de interpretación en Villoslada de Cameros que cuenta con una exposición permanente sobre la biodiversidad del Parque Natural; así como del Centro de Interpretación de la Trashumancia de Venta de Piqueras, en Lumbreras.