La experiencia es un grado o, al menos, eso se recuerda siempre que se afronta una final. La del 18 de julio en La Rosaleda lo es aunque Castellón o UDL, por los méritos contraídos, tendrán una repesca en caso de mal dadas.
Albinegros y blanquirrojos aspiran a abandonar el pozo de la Segunda B, categoría en plena transformación y que hay que despedir cuanto antes. Aunque los castellonenses ya saben lo que es ascender al fútbol profesional en la época reciente (lo hicieron en doble eliminatoria ante el Universidad de Las Palmas y el Zamora, sistema en vigor en la 2004-05 que no acabó cuajando), a la UDLse le ha negado en sus tres intentos precedentes: Huracán, Sevilla Atlético y Hércules fueron sus verdugos. Huelga decir que cuando los levantinos festejaban su regreso a Segunda, la UDLaún no existía.
Castellón y Sabadell son los dos clubes con más historia de los dieciséis que aspiran a dejar atrás la categoría aunque, atendiendo al currículo de sus futbolistas, los jugadores albinegros no andan sobrados de experiencia en este tipo de eliminatorias.
Óscar Cano cuenta en sus filas con tres futbolistas que participaron en la ansiada promoción a SegundaB hace dos temporadas. Se trata de David Cubillas, Javi Serra y Marc Castells. Este último, junto a Álvaro Campos, son los futbolistas que militan en el conjunto albinegro que fue eliminado por el Haro en la fase de ascenso de la ‘lejana’ 2014-15.
Sólo una docena de jugadores albinegros han protagonizado un ‘play off’ de ascenso a Segunda con la particularidad que tres cuartos de los mismos se quedaron sin gloria.
De hecho, a Segunda sólo han subido tres orelluts. Se trata de César Díaz, Gálvez y Paco Regalón.
César Díaz, pichichi del conjunto castellonense con diez dianas (el ‘recién’ llegado Ortuño totaliza siete, a las que hay que agregar las tres festejadas con el Córdoba), no pudo disfrutar del ascenso del Racing la temporada pasada, campeón del grupo II donde competía la UDL que acabó segunda, pues en enero fue cortado por Iván Ania. Eso sí, en la campaña 2013-14 se ganó con el Albacete el regreso a la categoría de plata.
En la plantilla manchega figuraba otro futbolista que hoy juega a las órdenes de Óscar Cano. Es el caso de Gálvez, segundo jugador en gozar del éxito.
El tercero en saborearla fue Paco Regalón, que militó en la Cultural Leonesa que en la 2016-17 regresó 42 años después a Segunda.
Sin gloria se quedaron Álvaro Campos (lo intentó con el Cádiz y con el Albacete), Juanto Ortuño (UCAM, 2014-15, al año siguiente Remón ascendería con los universitarios), Satrustegui (Real Murcia, 2015-16), Kako Sanz, Muguruza y el riojano AdriánLapeña (en la Real B que juntó con el Sporting B y Bilbao Athletic disputó el ‘play off’ en la 2017-18), Castells (Poli Ejido 2009-10) y Carles Salvador que el 15 de junio de 2019 jugó su último partido con la UDL (0-0 en Las Gaunas ante el Hércules).