La Policía Nacional de La Rioja ha detenido a tres jóvenes que agredieron a los agentes que acudieron a un domicilio de Logroño para desmantelar una fiesta ilegal en la que participaban ocho personas. Uno de estos tres jóvenes tenía cuatro antecedentes y ya fue privado de libertad como presunto autor de un delito de desórdenes públicos en los incidentes ocurridos en el centro de Logroño en la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre de 2020, ha detallado este lunes la Jefatura Superior de Policía en una nota.

Los hechos denunciados ocurrieron en la tarde-noche del pasado viernes, cuando los agentes requeridos a un domicilio en una calle céntrica de la capital riojana, donde un varón manifestó que tenía problemas con su sobrino, ya que este no quería abandonar el domicilio.

Una vez en el lugar, tras entrevistarse con este hombre, quien les dio permiso para entrar en su domicilio, les comunicó que su sobrino había montado una fiesta con siete amigos, quienes se dedicaban a beber y consumir sustancias estupefacientes sin adoptar ninguna medida de seguridad para prevenir la covid-19.

Cuando los agentes entraron en la habitación en la que se celebraba la fiesta, pidieron su identificación al grupo de jóvenes y les informaron de que no cumplían las medidas sanitarias, que limitan las relaciones sociales a los grupos de convivientes.

Sin embargo, los jóvenes siguieron fumando y bebiendo, les dijeron que seguirían de fiesta hasta terminar de tomar sus "cubatas".

Ante su negativa a ser identificados, los agentes volvieron a solicitarles los datos personales, por lo que dos chicos y una chica menor de edad mostraron "una actitud hostil y un comportamiento agresivo e irrespetuoso hacia los policías", quienes pidieron refuerzos ante la situación.

Al ser identificada la joven, de 17 años, se dedicó a insultar a los agentes y empujó a uno de los agentes, quien la tuvo que reducirla mientras ella "oponía gran resistencia, dando en todo momentos puñetazos y patadas a los agentes, llegando a arañar y morder a dos".

Cuando estaban identificando al resto del grupo, dos de los jóvenes intentan abandonar la fiesta sin ser identificados, haciendo caso omiso a los agentes, por lo que al ser interceptado también reaccionaron contra los policías, quienes detuvieron a los tres jóvenes como presuntos autores de un delito de atentado a agente de la autoridad.

Otra de las intervenciones se produjo en la madrugada del pasado jueves al viernes, en la Calle Gonzalo de Berceo de Logroño, cuando una patrulla interceptó a un conductor, un vecino de Logroño de 31 años, quien se encontraba bajo los efectos de sustancias estupefacientes y tenía caducada la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) del coche.

Posteriormente, cuando el varón fue sometido a la prueba de alcoholemia y drogas por parte de la Policía Local de Logroño, arrojó un resultado positivo en tres de los cinco tipos que puede detectar el test: anfetaminas, cocaína y cannabis, por lo que fue propuesto para sanción con 1.000 euros y retirada de seis puntos del carné de conducir.

Durante la inspección del interior del vehículo los agentes econtraron una bolsa trasparente con polvo blanco, al parecer cocaína, por lo que se le levantó acta por tenencia de sustancia estupefaciente.

Otra actuación para evitar riesgos de contagios se produjo el pasado jueves por la tarde en el ámbito privado de una de las urbanizaciones de la zona de Cascajos, donde había un grupo de siete jóvenes fumando sustancias estupefacientes e incumpliendo medidas sanitarias como la distancia de seguridad.

Los jóvenes fueron propuestos para sanción y se les retiraron los útiles para el consumo.

Durante la semana pasada, se han interpuesto un total de 319 sanciones por incumplimiento de la última normativa dictada por el Gobierno de La Rioja, que entró en vigor el pasado 22 de enero.

La Policía Nacional ha pedido a la ciudadanía responsabilidad, compromiso y colaboración para la aplicación de las medidas sanitarias, que pretenden la contención de la pandemia provocada por la covid-19.