Logroño, entre las ciudades más seguras para los negocios

El Día
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Un estudio de la empresa de seguridad Securitas Direct sitúa a la capital riojana, junto a Salamanca y Albacete, como las de menor riesgo de intrusión, inferior al 1,3%

Un cartel de aviso de alarma en un negocio. - Foto: Europa Press

Salamanca, Logroño y Albacete son las ciudades más seguras de España para tener un negocio, según el Barómetro de la Seguridad de Securitas Direct que sitúa a estas tres ciudades como las de menor riesgo de intrusión, inferior al 1,3%, seguidas de Jaén y Santa Cruz de Tenerife. Completan el 'Top 10' Almería, Burgos, Santander, Gijón y Las Palmas de Gran Canarias, todas ellas con un porcentaje menor o igual al 2%, como revela el estudio que la compañía realiza de forma anual apoyándose en los saltos de alarmas e intrusiones de sus más de 1,3 millones de clientes en ciudades con más de 100.000 habitantes.

 

En el ámbito provincial, Teruel, Salamanca y La Rioja son las provincias con menor volumen de intrusiones a negocios, lo que hace que sean las más seguras del país para regentar un comercio, ya que menos de un 1,2% de los usuarios de estas zonas han visto cómo saltaba la alarma de sus locales al detectar la presencia de intrusos. Les siguen de cerca Jaén y Albacete, con una ratio de intrusión inferior al 1,6%.

 

Cabe destacar como las provincias de Castilla y León y Aragón destacan a nivel nacional en lo relativo a la seguridad en el pequeño comercio, ya que Salamanca, Burgos y Ávila se posicionan en el 'Top 10', con una ratio inferior al 2,15%, mientras que Teruel y Huesca se posicionan en primera y sexta posición, con una ratio de intrusión menor al 1,6%. Por comunidades autónomas, La Rioja se coloca como la comunidad más segura para los negocios de España, con una ratio de intrusión del 1,1%, por delante de otras como Aragón (2%), Extremadura (2,1%), Navarra (2,3%) y Canarias (2,6%).

 

"La respuesta rápida ante un incidente en un negocio es la clave, especialmente cuando se trata de robos o intrusiones, para lo cual es fundamental contar con una combinación de medidas físicas y electrónicas que aseguren el mínimo tiempo de actuación" detalla Laura Gonzalvo, directora de Comunicación y RSC de Securitas Direct.

 

Por ello, la clave para la prevención reside en la combinación de elementos físicos con elementos electrónicos, que dificulten las intrusiones y disuadan a los posibles intrusos. Los elementos físicos son todos aquellos que hacen que el ladrón invierta tiempo para acceder al hogar o negocio, y le obliga, además, a hacer mucho ruido para poder derribar esas barreras, dejándole más expuesto, como rejas, cerraduras, puertas blindadas. Los elementos electrónicos son, ante todo, disuasorios y, en caso de que el ladrón decida finalmente acceder a la instalación, le apremian a abandonarla, como una alarma conectada a una central receptora de alarmas, o el dispositivo Zerovision que, además de disuadir, en caso de intrusión verificada, expulsa un humo denso y muy molesto que obliga al intruso a abandonar la instalación de inmediato.