Las ayudas del Gobierno de La Rioja a los proyectos piloto y emblemáticos para el reto demográfico en la región, dotadas con 900.000 euros, darán preferencia a los municipios con menos de 500 habitantes; la sostenibilidad y la digitalización; y la colaboración de agentes de naturaleza pública y privada.

Así lo ha anunciado este martes la directora general de Desarrollo Rural y Reto Demográfico, Nuria Bazo, en el acto de presentación de esta convocatoria pública a los alcaldes riojanos, al que han asistido la presidenta del Gobierno riojano, Concha Andreu; y la consejera de Territorio y Población, Eva Hita.

Bazo ha detallado que el plazo de presentación de solicitudes a esta nueva línea de ayudas, dotada con “fondos regionales”, está abierto hasta el próximo día 29 y "auxilia" gastos desde el 1 de junio de 2020 hasta el 20 de junio de 2022”, año en el que, en enero, se espera que salga otra convocatoria “con características similares”.

Ha indicado que los criterios de selección de proyecto incluyen “el cumplimiento de los objetivos del reto demográfico; el grado de financiación privada; la generación de empleo; la capacidad de transferencia, que se pueda replicar; y los temas sociales y sanitarios”.

“La inversión máxima que se puede auxiliar, que no presentar, es de 100.000 euros; y el porcentaje de subvención es el 80 por ciento”, ha precisado Bazo, quien ha añadido que “puede ser beneficiario cualquier actor del territorio; Administración local, mancomunidades; y personas físicas y jurídicas”.

Entre los objetivos de esta orden de subvenciones, ha destacado los de mantener la población; incorporar a nuevo pobladores, garantizar el acceso a los servicios públicos; y generar empleo.

Además, ha proseguido, "las bases incorporan la fórmula de los colaboradores, el beneficiario propone, pero debe incorporar colaboradores, que se van a sumar a la parte que consideren del proyecto”

“¿Qué puede ser subvencionable? Casi todo lo legal: el alquiler de terrenos, viajes, gastos de coordinación, de personal, y un 10 % en gastos indirectos”, ha precisado esta directora general.

Por su parte, Andreu ha remarcado que, “más que vacío, el medio rural español está lleno de retos, como el envejecimiento progresivo de la población, la natalidad, la desigualdad y la desarticulación territorial”.

Ha recordado que la densidad en La Rioja es de 62 habitantes por kilómetro cuadrado, "un dato que oculta dos realidades: que 6 de cada 10 personas viven en el 10 % de la superficie total y que, de los 174 municipios de la región, solo en 21 vive el 88 % de la población”.

El Gobierno de La Rioja, ha apuntado, no busca “revertir un fenómeno social que se desarrolla desde el siglo XIX”, como es “el problema de la desarticulación rural”, sino que trata de ser “realista y práctico”.

“Las administraciones no debemos caer en esa mitificación del medio rural”, sino “dar solución a los problemas con la perspectiva de conseguir el objetivo de permitir garantizar la igualdad de oportunidad para la ciudadanía que vive en el mundo rural y en las ciudades”, ha subrayado.

En su intervención, Hita ha asegurado que “lograr un mundo rural vivo, inteligente y atractivo necesita de la acción transversal de todas las administraciones para enraizar en los pueblos una política que permita que la recuperación llegue para todos”.

“Estamos convencidos de que es el momento de impulsar el medio rural del siglo XXI, que tenemos que construir juntos desde una amplia e inclusiva colaboración público- privada”, ha concluido.