Ficha técnica:

UDL: Dani Giménez, Iago López, Gorka Pérez (Unai Medina, 46), Clemente, Andoni (Jaime Sierra, 62), Paulino, Errasti (Roni, 62), Andy, Nano Mesa (Bogusz, 70), Olaetxea (Bobadilla, 46) y Leo Ruiz.

Djuka hace la señal del hat-trick. - Foto: Óscar Solorzano

Sporting: Mariño, Rosas, Valiente, Babin, Saúl, Cumic (Pérez, 83),Javi Fuego (Víctor Campuzano, 66), Gragera, Gaspar (Méndez, 77), Manu García (Díaz, 66) y Djuka(Carmona, 83).

Árbitro: Ávalos Barrera. Amonestó a Errasti.

Goles: 0-1, M. 13: Djuka, a pase de Gaspar; 0-2, M. 44: Djuka, a la contra; 0-3, M. 70: Djuka; 0-4, M. 83:Cumic acción personal.

Djuka es un dolor

Incidencias: encuencuentro correspondiente a la jornada 24 celebrado en Las Gaunas sin público.

Djuka entró en el imaginario blanquirrojo el 12 de septiembre y ahí sigue. Suyo fue el primer gol en contra del equipo riojano cuando agonizaba su debut en El Molinón y suyos fueron los tres tantos con los que el Sporting destrozó al conjunto de Sergio Rodríguez, inferior a los de David Gallego. El cuarto, de Cumic, llegó de regalo.

Djuka fue el mejor del partido. - Foto: Óscar Solorzano

En el minuto 13 tiró de oficio para convertir el primero tras una combinación preciosista con Gaspar. Al borde del descanso, resolvió la contienda con una carrera que le permitió plantarse solo ante Dani Giménez. No dudó y festejó el segundo. Cuando el ritmo languidecía en la segunda mitad, firmó el tercero, castigando la pasividad de la zaga. Tres goles que rehabilitan al cuadro asturiano y recuerdan a la Unión Deportiva Logroñés que empatar con rivales directos está muy bien (tablas sin goles ante Oviedo y Sabadell) pero que la salvación exige algo más. Tras una tarde para olvidar, que se cerró con Cumic ninguneando en el área a Unai Medina y logrando el cuarto, el bloque blanquirrojo sabe que ante el Alcorcón no existe margen de error.

El Sporting, necesitado de puntos en su objetivo de ascenso, arrancó ambicioso, sometiendo al conjunto logroñés al que le quemaba el balón. Gaspar, asociándose con Djuka, a punto estuvo de batir a Dani Giménez que tapó bien su hueco. Se llevaban apenas seis minutos y el monopolio visitante era total.

Estos mismos protagonistas fueron los encargados de tumbar el planteamiento riojano. Cuando parecía que el arreón inicial sportinguista remitía, Gaspar cogió una pelota en línea de tres cuartos, regaló una asistencia precisa a Djuka que repitió la ejecución del Molinón. Remate raso, seco, escorado, imposible para Dani Giménez.

La UDL estaba noqueada y tuvo suerte de que el marcador fuera su aliado. Un disparo desde la frontal, bien despejado por el arquero lucense, y un regalo impropio de Gorka, que Djuka sólo en el área no agradeció, pudieron condenar al conjunto riojano, víctima de un ataque de nervios.

Cuando más claro era el dominio visitante, con Djuka desarbolando a su par y el Sporting cerca del segundo, el equipo de Sergio Rodríguez tuvo el empate. La pelota le llegó a Leo Ruiz que, con todo a su favor, superó a Mariño pero estrelló el tanto de la igualada en el poste. Ocasiones así no se pueden desperdiciar.

Pese al fallo, la Unión Deportiva Logroñés despertó. El Sporting dejó de campar a sus anchas y los riojanos, con Paulino siempre ofreciéndose, comenzaron a inclinar el partido favorable a sus intereses. Mariño no se venció pero Leo Ruiz y Nano Mesa pusieron en entredicho la superioridad asturiana. Eso sí, al descanso, el Sporting dominaba en juego, ocasiones y goles porque Djuka se marcó una contra imparable para finiquitar las esperanzas riojanas. El 0-2 fue un castigo cruel que llegó cuando mejor estaba el cuadro local.

Tras la pausa, Sergio Rodríguez sacrificó a Gorka, siempre superado por el ‘23’, Olaetxea por Unai Medina y Bobadilla en busca de una reacción. Andy, de cabeza, pudo reabrir el partido pero el granadino no encontró portería.

El propósito de enmienda no duró mucho porque los de David Gallego volvieron a dominar el juego, con verticalidad y pegada aunque sin aumentar el daño. Primero Gaspar y después Gragera, tras una gran acción, dieron muestras de su peligro.

Cuando el Sporting parecía darse por satisfecho, Djuka, revolviéndose en el área ante la incapacidad local para despejar, se ganó el triplete. El serbio fue una pesadilla una vez más, destrozando a la zaga riojana una vez más derrumbada por la voracidad del atacante de Belgrado.

Fue el penúltimo coletazo de un partido que aún deparó otro desagradable incidente para el arco riojano: Cumic entró en el área, se revolvió a placer y tras obviar la marca del ex sportinguista Unai Medina, fusiló. 0-4. Tarde sonrojante de las que se tardan en olvidar.