El presidente de la Asociación de Empresarios de la Construcción (CPAR), Carlos del Rey, ha apuntado hoy a la construcción como "palanca de cambio" y ha pedido agilizar las licencias de obra así, como una apuesta por la rehabilitación.
Del Rey ha ofrecido una rueda de prensa en la que ha solicitado que se tenga en cuenta a las empresas constructoras y promotoras en los planes de contención laboral, permitiéndoles acceder a los ERTES de fuerza mayor y a las ayudas para hacer frente a las consecuencias del COVID-19 del ICO y del ADER en las mismas condiciones que el resto de sectores económicos.
También ha creído que debe implantase una política pública de avales de deuda comercial y de utilización de la contratación pública riojana para mantener el tejido económico y empresarial riojanos que contribuyan al mantenimiento del empleo local, desterrando la primacía del criterio económico.
Respecto a la fiscalidad, dada la situación de ralentización o paralización de la actividad en los distintos subsectores de la industria de la construcción, ha creído que no debe obligarse a pagar impuestos sobre previsiones de ingresos.
Además, con el fin de dar liquidez a las pymes se deben acelerar las devoluciones de IVA y, dado el carácter esencial de la vivienda, reducir al cuatro por ciento la tributación sobre la compra de vivienda y sobre las cesiones de suelo con cesión de superficie, así como el impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados.
También ha creído que se debe acelerar la tramitación administrativa y el cobro de las certificaciones de obra de los contratos ya adjudicados, y se deben licitar nuevos contratos para potenciar las infraestructuras hídricas, energéticas, sanitarias, educativas que permitan frenar la despoblación de las zonas rurales riojanas.
También ha abogado por crear un plan de mantenimiento de carreteras y puentes de La Rioja que contribuya a que sea más competitiva cumpliendo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Ha apuntado que se plantea la necesidad urgente de adaptar el urbanismo regional (LOTUR) y local (planes generales municipales) a las exigencias de habitabilidad y confort que serán necesarias en la nueva normalidad tras el COVID-19.
También ha visto necesario flexibilizar el urbanismo, apostando por la digitalización de los trámites administrativos para agilizar las licencias de obra y permitiendo la tramitación y obtención simultánea de la licencia de edificación junto a las de ocupación de vía pública, grúa, vado, derribos, contadores de obra, etcétera.
Junto a esto, ha planteado la adopción de un IVA verde reducido para todos los materiales y obras de rehabilitación y la creación de un plan renove energético riojano para, alineado con los principios de acción de la Declaración ante la Emergencia Climática y Ambiental, dar respuesta a las exigencias sanitarias derivadas de la crisis del COVID-19.
Ha estimado que el global de las medidas propuestas supondría incrementar un tres por ciento el PIB durante tres años, lo que puede tener un efecto inmediato en la recuperación económica y del empleo en La Rioja con la generación de alrededor de 4.500 empleos directos, y un cincuenta por ciento de retorno fiscal dada la inversión real adicional del 1,5 por ciento del PIB.