El Servicio de Extinción de Incendios y Salvamentos del Ayuntamiento de Logroño ha incorporado esta semana a su flota de vehículos un camión provisto de una escala telescópica articulada, con una altura máxima de 42 metros, lo que lo convierte en el vehículo de estas características de más alcance de La Rioja.

El alcalde de Logroño, Pablo Hermoso de Mendoza, ha informado de que "el nuevo vehículo podrá entrar en servicio en los próximos días, una vez que sea completada la formación a los bomberos".

Ha indicado que será utilizado, "entre otras tareas, para la lucha contra los incendios, principalmente en el entorno urbano; rescates y salvamentos de personas como consecuencia de incendios u otras causas, en sitios elevados o comprometidos; y para trabajos urgentes en altura, como desprendimientos, saneamientos de fachada, retirada de elementos, revisiones, accesos, entre otros".

La concejala de Igualdad y Convivencia y responsable de Bomberos, Eva Tobías Olarte, ha detallado que esta autoescala ha sido fabricada en Alemania y ha supuesto un gasto total de 894.190 euros.

Con este camión, el Parque de Bomberos de Logroño cuenta ya con una flota total de 18 vehículos, entre los que se encuentran otros dos vehículos de altura que por su antigüedad cuentan con menores sistemas de seguridad.

Se trata de una autoescala, similar al nuevo vehículo adquirido, que tiene más de 19 años de servicio, pero que tiene un alcance inferior de 37 metros, con la que se realiza un promedio de unas 400 horas de trabajo al año.

También, un autobrazo, con 24 años de servicio, cuyo tamaño y complejidad de emplazamiento hacen que se utilice preferentemente en entornos industriales o espacios amplios.

Tobías ha señalado que "aunque de momento coexistirán los tres vehículos, se empleará con mucha mayor preferencia el vehículo más nuevo, por las múltiples ventajas en cuanto a rapidez, facilidad de operación, seguridad y menor consumo de combustible y contaminación, ya que cumple la normativa EURO VI".

La mayor seguridad que aporta este vehículo, dados los numerosos sistemas de este tipo que incorpora, ha indicado, "está dirigida no solo a los bomberos ocupantes durante los desplazamientos, sino también a los usuarios de la autoescala (bomberos y víctimas o personas rescatadas), durante el trabajo en altura en emergencias, siempre arriesgado".

El nuevo vehículo, ha explicado el jefe de Bomberos, Alfredo Bazo, cuenta con un equipamiento muy completo: cámara térmica (visibilidad a través del humo), ventilador eléctrico de presión positiva, dos equipos respiratorios autónomos, con dos botellas de reserva, numeroso material de seguridad y rescate en altura como arneses, cuerdas; camilla de rescate con capacidad para 315 kg y monitor de agua integrado en la cesta, orientable en remoto, de hasta 2.500 litros/minuto.