El Ayuntamiento de Logroño instalará 100 contenedores marrones de recogida de materia orgánica en los barrios de Valdegastea, El Arco, La Guindalera, Cascajos y Los Lirios, y en las calles Portillejo, Avda. de Burgos, Rodejón, Entrena, Alfonso VI y Piqueras.

El alcalde de Logroño, Pablo Hermoso de Mendoza, y el concejal de Medio Ambiente, José Manuel Zúñiga, han presentado este lunes en una rueda informativa esta iniciativa, que comenzará el próximo 26 de abril y que forma parte del programa “Logroño+1”.

Hermoso de Mendoza ha explicado que la recogida selectiva de los residuos orgánicos es nuevo servicio público comprendido en cuatro fases diferentes y que tiene como objetivo “cuidar la ciudad y el medio ambiente”.

Zúñiga ha detallado que esta primera fase trata la recogida selectiva de materia orgánica en varios barrios de la ciudad para “segregar este tipo de residuo del resto y facilitar su transformación a productos útiles como abonos de uso agrícola”.

La idea, ha indicado, es obtener un conjunto de evidencias necesarias como el nivel de dificultad de reciclaje de los ciudadanos y del uso y acceso a los sistemas del punto marrón; el grado de satisfacción de los vecinos; el nivel de limpieza del espacio público; y la calidad de los residuos y su separación y reciclaje.

A su vez, ha explicado que la segunda fase del programa “Logroño+1” se iniciará a finales de 2021 o comienzos del 2022 y definirá un modelo único de recogida y depósito para toda la ciudad sobre la base de las experiencias, los datos y las evidencias del proceso de recogida y de la calidad de los residuos obtenidos.

La tercera fase, ha señalado, ampliará este nuevo servicio en los diferentes barrios de Logroño y la cuarta servirá para “seguir educando en reducción, en reciclaje y lograr que el día a día de las personas sea más sensible, atento y generoso con su medio ambiente”.

Por otro lado, Hermoso de Mendoza ha informado que este programa “Logroño+1” contribuye a “dar un paso más para hacer de Logroño una ciudad ‘residuo cero’, ya que cuenta con toda la infraestructura necesaria para reciclar todos los residuos que se producen en los hogares y en los trabajos”.

“Este nuevo sistema pretende contribuir al propósito de convertir Logroño en una ciudad verde y limpia, comprometida con la sostenibilidad ambiental y que avanza en el cumplimiento de los indicadores ambientales y en la responsabilidad del medio ambiente”, ha afirmado.

El objetivo, ha añadido Zúñiga, es alcanzar el 50% de residuos preparados para la reutilización y el reciclado.

“Esta iniciativa también es un paso más para que las personas contribuyan al bienestar de su ciudad, y es una oportunidad más para vivir mejor, porque el reciclaje mejora la calidad ambiental, que a su vez, repercute a la salud de las personas”, ha concluido.