A pesar de que hay grandes empresas de nuestro país que ya han parado y otras que han avisado de que la huelga del transporte ha distorsionado la cadena de suministros y va a obligarles a «interrumpir de forma temporal su actividad», en La Rioja, de momento y con carácter general, sigue todo en funcionamiento.
El paro de los camioneros alcanza hoy la décima jornada en protesta por el precio de los carburantes sin que el Gobierno se plantee -al menos hasta ayer- reunirse con la asociación convocante, la Plataforma para la Defensa del Transporte de Mercancías por Carretera, que agrupa principalmente a transportistas autónomos, y que ha logrado reunir para su causa a otras organizaciones, Atradis -integrada a Fenadismer- en esta comunidad.
Por segundo día consecutivo, los camioneros de La Rioja protagonizarán esta mañana una marcha lenta entre La Grajera y el polígono Cantabria, en la víspera de la que se espera una manifestación por el centro de Logroño y un día después de la primera caravana, que reunió ayer a 78 vehículos que circularon sin incidentes.
«Estamos contentos, porque ha venido más gente de la que en principio esperábamos», aseguraba Raquel Planchuelo que, aunque miembro de Atradis, ha secundado el paro desde el principio y destacaba que la importante presencia de ayer podría haber obedecido, precisamente, a que muchos conductores se habían sentido más respaldados al extenderse la protesta, a la que no tienen intención de renunciar.
«Es cierto que no se puede prolongar eternamente, pero hay gente que piensa que de perdidos al río, y ya que sale más caro arrancar que parar, pues sigue parado», cuanta Planchuelo, quien considera «agua de borrajas» el acuerdo alcanzado en la tarde del lunes entre el Ejecutivo y la Comité Nacional de Transporte por Carretera [el Gobierno ofrece a los transportistas una bonificación del gasóleo profesional con valor de 500 millones] porque entiende que son «migajas, pan para hoy y hambre para mañana».
Reunión con plataforma. Pero, por encima de todo, la transportista opina que el Gobierno «debe bajarse del burro» y reunirse con la Plataforma que ha convocado le paro, «una asociación legítima, legalmente constituida y que representa a un amplio colectivo de gente».Planchuelo muestra su incomprensión ante esta actitud del Gobierno de Sánchez, que después de haber mantenido reuniones «con gente como los separatistas», se niega a celebrar un encuentro «con una asociación de trabajadores».
«Mientras sigan en sus trece y no quieran reunirse con ellos, pues está difícil porque la Plataforma, que cuenta con muchos seguidores, no va a desconvocar el paro», vaticina la transportista, que protesta por la descompensación entre los precios del diesel y de los portes.
«Ya no es cuestión de a qué precio debe estar el gasoil, sino a qué precio debe ser un porte rentable», razona, al tiempo en que insiste en que se cumpla la ley de la morosidad para que los pagos se realicen en los plazos previstos
Y ayer también el despliegue de las Fuerzas de Seguridad del Estado en La Rioja durante todo el día para el paro de transportes fue de 202 agentes: 46 de Policía Nacional y 156 de Guardia Civil. La Benemérita escoltó a 23 camiones, de los que diez vehículos provenían de Burgos y tenían como destino a la comunidad de Navarra.