Poco más de siete meses después del fatídico derrumbe del edificio anexo al colegio Adoratrices de Logroño que costó la vida a un trabajador, la empresa Global Gémina ha presentado el proyecto para la construcción de la residencia de estudiantes. Un proyecto que ha sido redactado al margen de la planificación anterior que contemplaba la reforma del inmueble del número 8 de Juan XXIII. De hecho, el extenso documento se encuentra ya en dependencias municipales en fase abierta de alegaciones.

De esta forma, la futura residencia que gestionará la red Micampus, prevé habilitar hasta 97 habitaciones (individuales y dobles) con capacidad para un total de 131 residentes. La residencia, tal y como refleja el proyecto, consta de sótano, planta baja más tres plantas alzadas, éstas últimas dedicadas fundamentalmente a habitaciones. Todo ello bajo un presupuesto total estimado de 4,2 millones de euros y sobre una edificabilidad proyectada de 2.988 metros cuadrados en una parcela de 966,6 metros cuadrados. En este sentido, la proyección de la edificabilidad mantiene el ala interna hacia el patio del centro educativo y en paralelo a la fachada trasera de los edificios de Calvo Sotelo que allá por julio de 2023 tuvieron que ser desalojados tras el derrumbe del anterior inmueble anexo a Adoratrices.

Evidentemente, la fachada principal dará a la peatonal Juan XXIII desde donde se accederá igualmente al garaje de la futura residencia que contará con 24 plazas de aparcamiento.

Por su parte, la planta baja albergará trece habitaciones, recepción, gimnasio, zona de descanso, cine, sala de televisión y sala de estudio además de otras dependencias dedicadas a instalaciones eléctricas. 

adaptada al entorno. Por otra parte, las tres plantas alzadas se destinan fundamentalmente a habitaciones a razón de 18 en cada una de ellas.

Por último, el tratamiento de las fachadas, adaptado a la imagen de la vía, «es homogéneo, produciéndose un juego de integración del nuevo volumen en la actual calle e introduciendo acabados de aplacado de piedra y mortero de cal». Las barandillas se proyectan de acero galvanizado y las carpinterías de aluminio color gris.

Una única actuación volumétrica y arquitectónica

La futura residencia de estudiantes de la red Micampus, que ya dispone de otro centro de estas características en la zona de La Ribera, junto a la zona universitaria, «se contempla como una actuación unitaria desde al punto de vista volumétrico, arquitectónico y estético» Y de la misma forma, establece «una ordenación con un único volumen entre medianeras conforme a la geometría de la parcela y las alineaciones previstas en el Plan General Municipal» del Ayuntamiento de la capital riojana. Así, el nuevo edificio permitirá orientar los usos hacia el exterior y hacia el interior del mismo.

En cuanto a las tres plantas alzadas, contará con 97 habitaciones, 63 individuales y 34 dobles para un total de 131 camas.

De esta forma, 76 de ellas dispondrán de una pequeña cocina interior con vitrocerámica, campana extractora, fregadero y nevera. Para las 21 restantes, el proyecto habilita dos cocinas de carácter comunitario por planta.