La Rioja convive con la sensación de haberse sumergido de lleno en la crónica negra española en una región acostumbrada a la calma. Y los datos parecen empeñados en no apaciguar tales percepciones y no solo por los diez asesinatos, con toda su carga mediática, que se han sucedido de norte a sur y de este a oeste de la geografía riojana. Los datos del ministerio del Interior reflejan que además de esa decena de muertes violentas, La Rioja registra hasta 18 homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa entre los años 2019, 2021 y 2022 (no contabiliza 2020 debido a las restricciones impuestas por la pandemia).

Por ajustar los términos policiales y judiciales a la proximidad de la calle, un homicidio doloso es un subtipo de homicidio que se caracteriza porque el criminal busca intencionadamente el resultado de muerte de la víctima. Por su parte, el asesinato en grado de tentativa se genera cuando un sujeto tiene la intención de matar a otro pero no lo consigue. En cualquier caso, ambos supuestos tienen responsabilidad penal. La estadística que proyecta Interior está diseñada a partir de los datos remitidos por Guardia Civil, Policía Nacional y policías locales de una determinada comunidad autónoma. 

No ha trascendido dato alguno  en relación a estos 18 intentos de homicidio doloso y asesinatos en grado de tentativa registrados en el ámbito de la Comunidad autónoma de La Rioja si bien, se trata de casos que o bien se investigaron, o siguen en instrucción actualmente bajo estas premisas legales.

Por otro lado, son diez los casos en los que se logró materializar intencionadamente la muerte de la víctima. Dos de ellos se han resuelto con la máxima condena que impone la prisión permanente revisable (los casos de la niña Carolina y del pequeño Álex). En 2020 se produjo el asesinato del conocido profesor y poeta Pedro José Pérez Alfaro, aún no juzgado; el parricida de Nájera, que mató a su madre de 74 años y fue condenado a 20 años; y el crimen machista de una mujer que inicialmente se investigó como suicidio.

Ya en 202, La Rioja se estremeció con el asesinato de Issam en el parque del Ebro de Logroño, pendiente de juicio; La desaparición del joven de Entrena se investigó como asesinato aunque no ha aparecido el cuerpo y se juzgará este verano; El ya mencionado  asesinato de Álex; y el cadáver aparecido en el Ecoparque de Logroño del que nada se ha sabido desde entonces.

En agosto de 2022, en lo que se supone un ajuste de cuentas, se encontró un cadáver en una sima de la localidad de Viniegra de Arriba.

Y el presente ejercicio ha arrancado sin opción, de nuevo, a la calma. Guillermo Castillo fue encontrado fue hallado muerto en Cuzcurrita del Río Tirón con varias heridas producidas por arma blanca. Dicho de otra forma, 28 asesinatos, bien en grado de tentativa o consumados y homicidios dolosos en algo más de tres años. 

Y si nos remontamos a 2018, todavía permanece en el juzgado de instrucción número 3 de Calahorra el asesinato de un empresario de Rioja Baja que apareció en una balsa maniatado.