Rutas que dejan untar pan

Javier Alfaro
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Bares y restaurantes de carretera riojanos aprovechan su fama de buen producto a precio competitivo para seguir en pie gracias a trabajadores y familias, en una región en la que los camiones deben circular por autopistas y autovías

Alejandra González atiende sin pausa la barra del bar restaurante Chusmi, en el acceso a Agoncillo por la N-232. - Foto: Ingrid

Tienen fama de tener buenos precios y ofrecer productos caseros. Los bares y restaurantes de carretera permiten a los profesionales del transporte no desviarse de sus rutas para comer o picar algo y aprovechan las recomendaciones boca oreja y el auge de los foros y aplicaciones en internet para acercarse a nuevos públicos como familias o trabajadores de empresas relativamente cercanas. 

Son muchas las guías que recomiendan uno u otro establecimiento. Una de las más seguidas por transportistas, es la del portal especializado en cargas Wtransnet, que ha confeccionado el listado 'El Camionero Recomienda' con los 200 establecimientos más valorados en las carreteras de España.

En La Rioja hay seis seleccionados: el Hernani II, en la N-232 en Alfaro, dirección Castejón; el hotel Zenit, en la N-232 en Calahorra, dirección Pradejón; restaurante cafetería Chandro, en el centro de Pradejón; San Andrés en la N-120, en Alesón; en Logroño el Mesón Pepa, en la antigua N-232, actual avenida de Aragón en el barrio de Varea (Logroño) y el bar restaurante Chusmi, en el acceso al casco urbano de Agoncillo desde la N-232..

Dos trabajadores del polígono El Sequero hacen una pausa en el Chusmi de Agoncillo.Dos trabajadores del polígono El Sequero hacen una pausa en el Chusmi de Agoncillo. - Foto: Ingrid

En el bar restaurante Chusmi, en el acceso al centro de Agoncillo desde la nacional 232, la camarera Alejandra González destaca que el ajetreo es constante, especialmente «a las horas de los almuerzos, sin parar de sacar tortilla, y en las comidas, que nos piden mucha carne a la brasa y paellas, aunque los platos de cuchara son muy exitosos también».

Uno de sus clientes indica que «en esta zona no hay mucho bar decente, así que el Chusmi siempre es una buena opción: por precio y por producto. Las tortillas están muy buenas y los viernes con una cervecita sientan de lujo», indica Luis. Otra habitual, Paloma Romero, apunta, junto a sus compañeros, que trabajan «en el polígono y solemos venir porque la tortilla está muy buena».

Luis Nestares está al frente del Mesón Pepa, en la logroñesa avenida de Aragón. Luis Nestares está al frente del Mesón Pepa, en la logroñesa avenida de Aragón. - Foto: Ingrid

David, comercial de una compañía tecnológicas, comentaba en la terraza que estaban allí «echando un café porque nos pillaba de paso tras una reunión en El Sequero. Yo no lo conocía pero mi compañero sí y no tiene nada que envidiar a un bar del centro». 

Manuel, camionero ahora jubilado, reconocía que lleva «parando aquí toda la vida, antes porque me tocaba ir de aquí para allá trabajando y ahora porque me toca ir a Logroño al hospital. Yo donde veía mucho coche viejo, furgonetillas cascadas y camionrd, sabía que era un buen sitio».

 

Rubén Pérez, jugador del Varea, es un habitual del Mesón Pepa.Rubén Pérez, jugador del Varea, es un habitual del Mesón Pepa. - Foto: Ingrid

Gustos variados. Cruz García trabaja como transportista desde hace seis años, «a veces llevo un furgón y otras, un camión pequeño y hago rutas de transporte semiurgente entre empresas en la ruta Vitoria, Miranda, Logroño, Tudela, Zaragoza, Huesca, Pamplona y Vitoria con paradas intermedias y algunos desvíos». Apunta que hay bastantes diferencias entre veterano y más jóvenes. «A los jovencillos les sueles ver yendo a coger una Coca-cola o Monster y unas patatas en las gasolineras aunque sale más caro, porque en ruta como en todo, hay gustos para todos», comenta. 

«Mis compañeros veteranos que tienen sus sitios preferidos me los comentan. Algunos son un acierto y otros no. Yo en invierno he bebido auténticos brebajes como caldo y del café ni hablamos, hay lugares con cafés extraordinarios y en otros tomas agua sucia con barro». 

Preguntada por los foros que recomiendan lugares asegura que «te los crees a ratos. Yo soy más de las estrellitas del Google Maps y con menos de 3,7 no me arriesgo. En mi opinión La Rioja está poco actualizada porque con un camión tienes que ir por autopista o autovía y hay recomendaciones de hace años que antes estarían bien pero yo creo que ahora no tanto». 

Además, subraya que «los precios de las áreas de servicio de la autopista son de atraco. En ninguna cobran a menos de 2 euros el café cortado».  Si me preguntas a mí las franquicias Valcarce, que hay una en la A-12 por Hormilla, tienen buen servicio. En San Asensio, la Bodega, que como hace tiempo que no paso por allí no sé si estará abierta. Entre Alfaro y Castejón, el Hernani 2, y La Grajera no está en foros y siempre está lleno».

Otro de los más recomendados es el conocido Mesón Pepa, en el área de servicio de la avenida de Aragón, la antigua nacional 232 entre Varea y La Portalada. Uno de los clientes, Rubén Pérez, asegura que es un habitual. «Vengo desde hace muchos años con mi hermano y mi padre, que trabaja por aquí, y también porque yo juego en el Varea y por cercanía, comodidad, comida, trato y por todo venimos mucho». Apunta que en este mesón, «tienen todo casero, del día, ya tenemos nuestros platos favoritos y seguimos viniendo porque es como comer en casa: hay buena paella, purés, pescado, carne... de todo».

Luis Nestares, propietario del negocio apunta que el grueso del trabajo se da entre semana a la hora de la comida, «de una a cuatro». «Creo que lo que más destaca de aquí es que llevamos 70 años con comida totalmente casera y con limpieza, y nuestro menú que por 13 euros lleva primero, segundo, postre, pan, bebida y café». Los platos más vendidos son «el bacalao a la riojana, las patatas a la riojana, el caparrón y las alubias, todas como las de la abuela».