Pilar Cernuda

CRÓNICA PERSONAL

Pilar Cernuda

Periodista y escritora. Analista política


Feijóo a por todas... con dificultades

01/05/2023

Se está dejando la piel, pero no tiene fácil teñir el mapa de azul, como quiere Feijóo.

Ganar en votos el 28 de mayo lo dan como probable la mayoría de los sondeos, pero cosa distinta es que los pactos posteriores puedan arrebatar alcaldías y gobiernos autonómicos en capitales y regiones en las que el PP tuvo mayoría. Los datos que manejan en Génova son malos en País Vasco, Cataluña y Navarra, aunque ganarían en las restantes comunidades. Pero el Psoe daría el gobierno a Revilla en Cantabria con tal de que no gobierne el PP, en Asturias es difícil destronar a Barbón, y los gobiernos de La Mancha y Extremadura dependerán de que Podemos consiga representación parlamentaria; Valencia, Aragón y Baleares pueden caer hacia el PP o el Psoe, está todo muy abierto.

Por eso Feijóo se está dejando la piel, pero también lo hace Pedro Sánchez. Con diferencia entre los dos contendientes. Sánchez tiene el falcon para moverse por todo el territorio con rapidez y facilidad y dormir en La Moncloa, mientras Feijóo recorre en avión, ave y coche por toda la geografía, y procura tener contacto directo con los ciudadanos, donde además se siente cómodo. ¿Expectativas? En el equipo de Feijóo se advierte una prudencia que no tenían hace pocos meses, cuando el triunfalismo les hacía creer que estas elecciones, y sobre todo las generales, iban a ser un paseo militar.

Solo los que tienen experiencia política de años saben cómo se las gasta Pedro Sánchez, que al contrario de los presidentes socialistas anteriores no tiene límite cuando se marca un objetivo. Experto en encontrar los puntos flacos de sus adversarios, es más experto todavía en el engaño y en promesas que no se pueden cumplir por falta de dinero, no son constitucionales o no se basan en escenarios realistas, como crear más de un millón de puestos de trabajo en los próximos 3 años.

El anuncio ha sido recibido con absoluto escepticismo por los organismos y sectores implicados en la creación de empleo. Pero a Sánchez no le preocupa. Está volcado con los pensionistas, su principal fuente de votos ante una juventud derechizada y que pasa de acudir a las urnas, y centra su campaña en hacerse con la confianza de los mayores.

En un escenario así Feijóo debe hacer ejercicios malabares para contrarrestar la campaña de Sánchez, sus promesas y la dureza con la que arremete contra el PP. ¿Es correcto presentar un perfil bajo, de autocontrol y serenidad, frente a un jefe de gobierno que, ante el temor a perder el poder se muestra en ocasiones como un energúmeno? ¿Es eficaz descartar el ataque inmisericorde ante el ataque feroz?

Hay votantes del PP que no ocultan su decepción, pero Feijóo y su equipo deben conocer los datos que les llevan a mantener esa línea. Eso sí, tendrán que rendir cuentas sobre la estrategia de campaña si no logran buenos resultados.