A pesar de que la LOMLOE introdujo en 2022 la repetición de curso como una medida excepcional y establece una evaluación «objetiva, global, continuada y formativa», las tasas, que experimentaron una brusca caída debido a la pandemia, han vuelto a repuntar y se acercan a las cifras previas a la manifestación del coronavirus. En el conjunto del país la tasa de repetidores de Primaria ha pasado del 1,2% del curso 20/21 al 2,1% del año 21-22 y en la ESO se constata una subida del 4,2% al 7,6%; por lo que respecta a Bachillerato, el crecimiento ha sido superior al 100%, desde el 3,4% al 6,9%.
En el caso de La Rioja esta tendencia ha seguido el mismo camino y en el caso de Primaria, el crecimiento ha sido desde el 1,6 al 2,9%, que en el caso de ESOha sido del 3,7% al 7,9, aunque todavía manteniendo distancia del 9,3% del año precovid. Por lo que respecta a Bachiller, el índice decreció desde el 5,9% del año académico 2019-2020 a un escasamente representativo 1,5 el curso siguiente, para repuntar al 5% uno después.
Rafael Marcos, coordinador académico del Máster Universitario en Formación del Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanzas de Idiomas de UNIR, constata que durante la pandemia se tomaron medidas «excepcionales», lo que ayudó a rebajar el nivel de repetidores y augura que a medio plazo la tendencia va a ser de aumento. «Estaremos rondando los datos de 2019-2020», vaticina este experto que, aunque apunta que se mantienen las medidas excepcionales que se adoptaron durante la pandemia, se ha vuelto a la normalidad y el contexto en el que se desenvuelve el alumno en el aula es similar al anterior al estallido de la crisis sanitaria.
Durante el primer estado de alarma, que conllevó el confinamiento general y la impartición de clases online, la que era entonces titular del Ministerio de Educación, Isabel Celaá, decretó una serie de medidas encaminadas a facilitar el alumnado la consecución de los objetivos académicos. Entre otras cuestiones, en junio de 2020 se estableció que se podía pasar de etapa educativa con materias suspendidas, medidas de relajación que aún perduran.
Pormenorizando en las cifras que ofrece el Ministerio de Educación, de manera general, los chicos son más repetidores que las chicas y en los concertados se pasa más de curso que en los púbicos, una tónica que no ha cambiado con respecto a la etapa previa al coronavirus. Así, en el caso de Primaria, la tasa de repetidores en los concertados riojanos fue del 1% en el curso 2020/21 y del 2% al siguiente (del 2,4% en 2019-2020); en el caso de la pública, ha pasado del 2% al 3,4%, solo una décima más bajo que en el curso prepandemia. Por sexos, la tasa de repetición de las niñas fue del 2,6 frente al 3,2 de los niños en el último curso con datos definitivos.
El porcentaje de repetidores es en Secundaria el mayor de todos los niveles educativos, aunque se repite la menor incidencia en centros concertados. En este caso, fue del 5,4% del alumnado en los privados el último curso recogido por la estadística del Ministerio, 2,9 puntos más que el de la pandemia, aunque lejos aún del 7,8 del año académico 2019-2020.
Esta distancia es muy inferior en los institutos y, así, si en el año 2020-21 el nivel de repetidores fue del 4,5%, al curso siguiente creció hasta el 9,5%, solo ocho décimas menor al previo a la pandemia. En el conjunto del país, la tendencia es idéntica, del 9,2% en públicos y el 3,2% en privados.
El número de repetidores fue del 8%, mientras que fueron un 7% de repetidoras en un nivel en el que la distancia con el curso prepandemia contempla mejor comportamiento en el caso de los varones, fue entonces del 10,7%, que en el de las chicas, 7,9%;del 8,8 y 6,3, respectivamente, en nuestro país.
Bachillerato. Ya en Bachillerato, la distancia es de 3,7 puntos entre pública -6,9- y privada -3,2-;diferencia que fue apenas perceptible durante el covid - 1,5 frente al 1-, y que se ha estrechado de manera notable desde el curso anterior -9,2 frente al 2,5% en 2019/20- De hecho, es en Bachillerato en la concertada el único nivel y tipo de centro donde el índice de repetidores es mayor que antes del estallido de la epidemia. En el conjunto del país, la distancia es aún mayor y alcanzó el 8,5% en los públicos y el 3,2% en los privados. En lo que no varía es en el caso de los sexos, y repiten el 3,9% de las chicas y el 6,4% de los chicos, todavía por debajo del 7,1 y el 5 del 2019-2020.
En España, las tasas son más elevadas, el 8,3 de las varones y 8,3 de las jóvenes.
El índice de repetidores ha crecido en todo el país, y destaca Murcia, que muestra los índices más altos en dos de las tres etapas educativas: en Primaria y Secundaria. En Bachillerato también registra un índice elevado (10,3%) solamente superado por el de Castilla y León (11,6%). En ESO las tasas de repetición más altas del país corresponden a Murcia (11,7%), Castilla-La Mancha y Andalucía (ambas con un 10,5%) Comunidad Valenciana (8,1%), La Rioja (7,9%) y Aragón (8%). En cuanto a Bachillerato, el mayor número de repetidores se da en Castilla y León (11,6%); Murcia (10,3%); Castilla La Mancha (8,8%), Andalucía (8,5%) y Extremadura (8,1%).