La Junta General de Accionistas se acaba de reunir para validar las cuentas de la temporada 2020-21, las del ascenso al fútbol profesional, que se saldaron con un déficit de 2.497 euros. Además, el club ha sentado las bases económicas para la temporada en cursa en la que el club contará con su segundo presupuesto más ambicioso en sus trece campañas de historia. La Unión Deportiva Logroñés tendrá 3.231.098 euros para intentar el ascenso. “Estamos apostando fuerte por el club y la realidad es que generamos más ingresos y también contamos con la ayuda del descenso, de la que este año usaremos el 50%, 625.000 euros”, aclaró Félix Revuelta, en declaraciones facilitadas por el club.
Félix Revuelta ha explicado de primera mano los problemas de la ciudad deportiva y ha insistido en que “no voy a abandonar ni el club ni la construcción de la ciudad deportiva, si no es en Logroño será en otro sitio, pero se hará”.
La reunión con los accionistas sirvió para presentar los detalles económicos del ejercicio 2020-21, en el que la entidad blanquirroja formó parte de Segunda división. En dicha campaña se ejecutó un presupuesto de 7.688.865 millones de euros, con un resultado de 2.497 euros de déficit. Se trata del presupuesto más ambicioso del club en su historia.
En el repaso de las cuentas, el mandatario ha destacado que “la entidad está saneada, es potente y tiene un capital social de 5,4 millones de euros, con casi 1,3 millones de euros de patrimonio en los terrenos de la ciudad deportiva”. Precisamente ese ha sido uno de los puntos que ha ocupado gran parte del encuentro entre los accionistas blanquirrojos. Y es que Félix Revuelta ha querido explicar de primera mano cómo se han ido desarrollando los acontecimientos desde septiembre de 2019 hasta nuestros días, cuando el presidente ha levantado su voz contra la situación de bloqueo para ejecutar la ciudad deportiva.
“Para un equipo de referencia es esencial tener ciudad deportiva. El año pasado ya hubo jugadores que se negaron a venir por las instalaciones. Y ahora lo que planteamos es la fase uno, que implica la construcción de un campo de hierba natural para el primer equipo y dos de hierba artificial para el fútbol base, con edificaciones movibles de madera para vestuarios”, ha recalcado. Una construcción que no se aprueba por el tema de los accesos, lo que ha llevado al desencuentro actual con el Consistorio logroñés.
“Hay dos aspectos que quiero dejar claros: no voy a abandonar ni el club ni el hacer la ciudad deportiva, la vamos a hacer, si no es en Logroño, será en otro lugar: Lardero, Alberite, Villamediana o si hace falta nos vamos a Viana o a Oyón”, ha indicado Revuelta, quien ha dado de plazo hasta enero para poner en marcha el proyecto en tierras logroñesas. Por último, ha insistido en que “la ciudad deportiva no es un proyecto de Félix Revuelta, si no de 500 accionistas, de 96 empleados y aspiramos a alcanzar los 5.000 abonados esta temporada”.